El fabricante de automóviles Mercedes-Benz está sintiendo los efectos de la débil demanda de modelos de gama alta en China y de vehículos eléctricos.

Según las cifras publicadas el viernes, la empresa de Stuttgart vendió el año pasado 1,98 millones de vehículos, un 3% menos que hace un año. El crecimiento en Norteamérica no pudo compensar la caída en China y Europa.

Mercedes citó la menor demanda de coches eléctricos, los cambios de modelo y las condiciones del mercado en China como razones del descenso de las ventas de los modelos de gama alta. La crisis del mercado inmobiliario chino desanimó a muchos clientes adinerados de ese país a comprar un coche. La empresa de Stuttgart vendió un total de 281.500 modelos de gama alta, un 14% menos que hace un año. También descendió el negocio de los vehículos de gama de entrada. Por el contrario, las ventas de coches de gama media aumentaron. En el segmento de las furgonetas, las ventas cayeron un 9% hasta los 405.600 vehículos, en parte debido a que la demanda de furgonetas camper está volviendo a caer tras el auge de los coronavolúmenes.

El negocio de los coches eléctricos sufrió un importante revés: los suabos sólo vendieron 185.100 coches totalmente eléctricos, un 23% menos que hace un año. Para cumplir con los límites de CO2 en Europa este año, los fabricantes de automóviles dependen de unas mayores ventas de coches eléctricos. Para evitar multas, Mercedes ya ha acordado un pool con su filial Smart, ahora totalmente eléctrica, así como con Volvo y Polestar. En este pool, la empresa de Stuttgart puede compensar sus emisiones de dióxido de carbono con los coches eléctricos de emisiones cero de los otros tres fabricantes.

(Informe de Christina Amann, editado por Ralf Banser Si tiene alguna pregunta, póngase en contacto con nuestra redacción en Berlin.Newsroom@thomsonreuters.com (para política y economía) o Frankfurt.Newsroom@thomsonreuters.com (para empresas y mercados)