Los reguladores estadounidenses dijeron que no debían seguir conduciéndose hasta que fueran inspeccionados en un concesionario.

La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras dijo que el fabricante de automóviles alemán estaba emitiendo un retiro voluntario de "No conducir" debido a los reforzadores de frenos potencialmente corroídos que podrían afectar gravemente la capacidad de frenado, aumentando el riesgo de un choque.

La agencia dijo que se aconseja a los propietarios que no conduzcan sus vehículos hasta que visiten un concesionario para su inspección.