La adquisición se inscribe en las ambiciones estratégicas de crecimiento de Ferrero en la categoría de helados, indicó el grupo italiano en un comunicado, añadiendo que las dos empresas eran de propiedad familiar y tenían una amplia experiencia en confitería.

Los grupos no revelaron los detalles financieros del acuerdo. Se espera que Wells, con sede en la localidad de Le Mars, Iowa, genere este año unos ingresos de alrededor de 1.700 millones de dólares.

La transacción de Wells Enterprises es la última de una serie de operaciones que el grupo italiano ha completado en Estados Unidos desde 2017.

Ferrero y sus empresas cuentan ahora con más de 8.000 empleados, nueve oficinas y 18 plantas en Norteamérica.

Wells, que se fundó en 1913 como un negocio de carros de reparto de productos lácteos, se ha convertido en la mayor empresa de helados de propiedad y gestión familiar del mundo.

La propia Ferrero se fundó en 1946 en una pequeña pastelería de Alba, cerca de Turín, en el norte de Italia, y se ha convertido en un grupo global, impulsado por la agresiva campaña de adquisiciones lanzada por su presidente ejecutivo Giovanni Ferrero.

"Esto representa una asociación beneficiosa para todos, que reúne a expertos en helados y a campeones de la confitería", declaró Giovanni Ferrero en un comunicado.

"Juntos, tenemos el poder de uno y estamos bien situados para crecer y competir en el mercado del helado", añadió.

Ferrero compró la empresa española de helados ICFC en un acuerdo en dos etapas en 2019 y 2021.

Se espera que la transacción de Wells, sujeta a las condiciones de cierre habituales, se cierre a principios de 2023.

UBS actuó como asesor financiero y McDermott Will & Emery LLP como asesor jurídico de Wells. Morgan Stanley actuó como asesor financiero y Davis Polk & Wardwell LLP como asesor legal de Ferrero.