Los bancos centrales de Australia, Nueva Zelanda y Corea del Sur celebran reuniones sobre los tipos de interés, mientras los datos de inflación de todo el mundo ponen de manifiesto las repercusiones económicas de los cambios tectónicos en la política comercial estadounidense.
Aquí tiene un resumen de la semana que viene, elaborado por Dhara Ranasinghe, Sam Indyk y Sinead Cruise en Londres, Lewis Krauskopf en Nueva York y Kevin Buckland en Tokio.
1/ FINALIZANDO CON UN CHIP
Los resultados de Nvidia, un gigante del sector de la inteligencia artificial que se ha convertido en un campo de batalla en el comercio mundial y la geopolítica, se darán a conocer el miércoles y cerrarán la temporada de presentación de resultados del primer trimestre en Estados Unidos.
Nvidia forma parte de las «Siete Magníficas», un grupo de megacapitalizadas cuyas acciones se han recuperado con fuerza desde principios de abril, tras un comienzo de año difícil.
Sus chips de IA han contribuido a catapultar a la empresa hasta convertirla en una de las mayores del mundo por capitalización bursátil y le han dado peso en los índices bursátiles mundiales. Sin embargo, tras dos años de ganancias masivas, el rendimiento de las acciones se ha estabilizado en lo que va de 2025.
El informe de Nvidia podría poner a prueba el repunte del mercado bursátil, con el S&P 500 acercándose a máximos históricos tras tambalearse al borde de un mercado bajista el mes pasado.
2/ EL PUNTO DE PARTIDA
No es de extrañar que los niveles de deuda pública se hayan disparado, dada la presión implacable para aumentar el gasto en todo, desde la defensa hasta la sanidad, pasando por el envejecimiento de la población y el cambio climático.
Pero las consecuencias de que los gobiernos no hagan lo suficiente para mejorar sus finanzas están pasando factura.
Apenas unos días después de que Estados Unidos perdiera su calificación crediticia AAA con Moody's, la venta de 16 000 millones de dólares en bonos del Tesoro estadounidense a 20 años registró una demanda débil y Japón obtuvo los peores resultados en una subasta desde 2012, lo que llevó los rendimientos de los bonos del Estado a 30 años a máximos históricos.
Un rincón del mercado de bonos que no se caracteriza por su volatilidad, los bonos del Estado a largo plazo, se ha convertido de repente en un punto caliente. Además del aumento de los rendimientos de los bonos del Estado japonés, los rendimientos a 30 años de Estados Unidos han vuelto a situarse por encima del 5 %, arrastrando al alza a los demás.
Japón venderá más deuda a largo plazo en los próximos días. Estén atentos a esas subastas. Los vigilantes de los bonos han vuelto.
3/ ANHELO DE SUBIR LOS TIPOS
Sin dejarse intimidar por los agresivos e impredecibles aranceles estadounidenses, ni siquiera por la reciente subida de los rendimientos de los bonos, el Banco de Japón ha mantenido una actitud muy tranquila al afirmar que tiene previsto seguir subiendo los tipos de interés si los precios aumentan en línea con las previsiones.
El aumento de los precios del arroz ha impulsado la subida. El índice de precios al consumo de Tokio, que sirve de referencia, se publicará el 30 de mayo, tres semanas antes que el índice nacional. Las cifras de hace un mes alcanzaron su máximo en dos años.
Los datos sobre la inflación en Australia que se publicarán el miércoles serán objeto de atención, después de que el banco central recortara los tipos en mayo y se mostrara abierto a una mayor flexibilización, ya que el enfriamiento de los precios da margen a los responsables políticos para hacerlo.
Se prevé que el banco central de Nueva Zelanda recorte el tipo de interés oficial otro cuarto de punto el mismo día. El jueves, el Banco de Corea parece dispuesto a recortar los tipos ante la preocupación por los crecientes obstáculos económicos.
4/ INDICADOR DE PRESIÓN
La inflación vuelve a ocupar un lugar prioritario en la agenda de los responsables políticos de otros países.
El indicador de inflación objetivo de la Fed, el gasto en consumo personal, correspondiente al mes de abril y que se publicará el 30 de mayo, podría ofrecer una imagen más clara del impacto que están teniendo los aranceles estadounidenses.
Abril fue un mes volátil tras la ofensiva arancelaria del presidente estadounidense, Donald Trump, el 2 de abril, pero los últimos datos sobre los precios al consumo y a la producción no han dado señales de alerta inflacionistas por el momento.
Las presiones sobre los precios influyeron claramente en la decisión colectiva de la Fed de mantener los tipos sin cambios este mes, con una advertencia de que había aumentado el riesgo de una mayor inflación, lo que frenó las expectativas de recortes de tipos a corto plazo.
Las mayores economías de la zona euro, Francia y Alemania, publicarán los datos sobre los precios al consumo el martes y el viernes, y las cifras para todo el bloque se darán a conocer la semana siguiente.
5/ MEGA MAYO
Con el temor a la enorme deuda de Estados Unidos frenando el repunte de sus activos, los inversores planean cómo defender sus carteras de nuevas fluctuaciones en la mayor economía del mundo.
Los principales gestores de fondos de JPMorgan y Goldman Sachs están aumentando las coberturas para amortiguar algunos de los golpes a los bonos del Tesoro y las acciones estadounidenses. Otros están aprovechando los días de mayo para vender con mayor convicción y diversificar sus exposiciones inyectando más dinero en Europa.
Los fondos cotizados en bolsa europeos han atraído 34 000 millones de euros (38 600 millones de dólares) en efectivo durante el año hasta el 16 de mayo, cuatro veces más que los 8200 millones de euros invertidos en fondos de renta variable estadounidenses, según datos de Morningstar.
En comparación, en 2024, los flujos netos hacia los fondos de renta variable estadounidenses en Europa habían dominado en una proporción de más de 8:1 sobre los productos centrados en el mercado local.