Oracle, el gigante estadounidense del software, es conocido principalmente por sus bases de datos, sus aplicaciones empresariales (ERP, CRM) y sus servicios en la nube. Su actividad se basa en la venta de licencias de software, suscripciones en la nube, en particular a través de Oracle Cloud Infrastructure, así como en servicios tecnológicos dedicados a las grandes empresas. Su plataforma de informática en la nube se posiciona como competidora directa de actores bien establecidos como AWS (Amazon) o Azure (Microsoft).

Para una empresa que cotiza en bolsa, responder a las expectativas del mercado es a menudo un ejercicio de equilibrio. En este contexto, el cuarto trimestre de Oracle fue objeto de un minucioso escrutinio, especialmente en lo que respecta al crecimiento de la cartera de pedidos. El consenso ya esperaba un sólido crecimiento del 40%, pero Oracle lo superó al anunciar un 41%, al tiempo que anticipaba una duplicación de esta misma cartera para el ejercicio 2026 (sin contar Stargate). Esta rentabilidad refleja una sólida posición estratégica en el desarrollo de la inteligencia artificial. El grupo prevé además una notable aceleración de su crecimiento en la nube, del 24% en 2025 al 40%, con un segmento de IaaS (infraestructura como servicio) que se espera que crezca un 70%, frente al 51% del año anterior.

Oracle parece, por tanto, dispuesta a retomar una trayectoria más alcista, ya que su máximo histórico se remonta a finales de 2024. Además, la empresa fundada por Larry Ellison sigue teniendo un potencial de crecimiento aún subestimado, especialmente con Stargate, la empresa conjunta centrada en inteligencia artificial creada con Softbank y OpenAI. Si bien el proyecto sigue siendo difuso a día de hoy, el establecimiento de un rumbo más claro y de perspectivas concretas podría reforzar la confianza del mercado a largo plazo.

Pero no todo será tan sencillo. Habrá que vigilar de cerca los gastos de capital del grupo, un aspecto que sigue estando muy subestimado en los precios actuales. Como recuerda nuestra compañera Odile Dubois, los gastos de Oracle ya están dando que hablar, y Stargate podría dispararlos aún más.