Al representar el 20% de las exportaciones estadounidenses de GNL, la reanudación de la instalación es importante para aliviar la restricción de los suministros mundiales de GNL, sobre todo porque Europa está reconstruyendo su almacenamiento de gas después de que Rusia cortara las exportaciones de gas tras la invasión de Ucrania por Moscú.

"No ha habido ningún mensaje oficial, pero nadie espera ningún cargamento hasta finales de febrero como muy pronto", dijo una de las fuentes.

"La segunda quincena de enero está ya fuera de la vista", dijo otra fuente.

La portavoz de Freeport LNG dijo que el calendario de reinicio seguía en pie y que la empresa seguía teniendo como objetivo la segunda mitad de este mes para el reinicio inicial y seguro de su instalación de licuefacción, a la espera de las aprobaciones reglamentarias.

Inicialmente se esperaba que la instalación se reiniciara en octubre, pero se retrasó ese objetivo varias veces desde que la planta cerró por primera vez el 8 de junio tras un incendio que un informe de consultores determinó que se debió a procedimientos operativos y de pruebas inadecuados, y a errores humanos y fatiga.

A finales de diciembre, la empresa dijo que los trabajos de reconstrucción estaban sustancialmente terminados, pero que los reguladores debían aprobar la reanudación, y añadió que no preveía que la reanudación inicial de sus instalaciones de licuefacción comenzara hasta la segunda quincena de enero de 2023.

Los retrasos han obligado a grandes clientes como JERA y Osaka Gas a contabilizar pérdidas de cientos de millones de dólares. Sus otros grandes compradores incluyen a BP, TotalEnergies y SK E&S.

Las exportaciones estadounidenses de GNL no han dejado de aumentar durante años y, en 2022, Estados Unidos se convirtió en el principal proveedor de GNL de Europa, donde la demanda se disparó tras la decisión de Moscú de cortar en gran medida el suministro de gas canalizado.

Tanto la Comisión Federal Reguladora de la Energía de Estados Unidos (FERC) como la Administración de Seguridad de Oleoductos y Materiales Peligrosos (PHMSA) del Departamento de Transporte tienen que aprobar la vuelta al servicio de Freeport.

Muchos analistas no esperan que la planta regrese hasta el primer o segundo trimestre porque la empresa aún tiene mucho trabajo que hacer para satisfacer a los reguladores.