Tras caer hasta un 5,5%, las acciones de Osaka Gas habían recortado algunas pérdidas y cotizaban con un descenso del 2,3% a media tarde. El índice de referencia Nikkei 225 bajaba un 1,5%.

Una explosión y un incendio ocurridos el 8 de junio habían dejado fuera de servicio la planta de 15 millones de toneladas al año (mtpa) de Freeport LNG en Quintana, lo que agravó la escasez mundial de GNL en medio de la reducción de los flujos de gas procedentes de Rusia, y pesó mucho en los precios nacionales del gas natural.

Osaka Gas, que compra 2,32 millones de toneladas de GNL a Freeport al año en virtud de un contrato a largo plazo y posee una participación en el proyecto, recortó el lunes su previsión de beneficios netos en un 62% para el año hasta el 31 de marzo, hasta 31.500 millones de yenes, desde su estimación de abril de 82.000 millones de yenes, citando el impacto negativo de 79.500 millones de yenes por el cierre de Freeport LNG.

El daño incluye un cargo único de 31.400 millones de yenes contabilizado en el trimestre abril-junio y mayores costes de aprovisionamiento, entre otros, dijo la empresa.

Osaka Gas advirtió en julio que podría registrar un gran gasto, incluyendo el coste de aprovisionamiento alternativo durante el periodo de parada de Freeport y el cambio de contrato.

Freeport LNG estima la reanudación de las operaciones parciales de licuefacción para principios de octubre y la vuelta a la producción plena para este fin de año.