2 mar (Reuters) - La aviación rusa se encaminaba al aislamiento el miércoles, ya que Boeing y Airbus interrumpieron el suministro de componentes, mientras los analistas predijeron que las compañías aéreas podrían buscar piezas en sus aviones aparcados o verse tentadas a explorar fuentes alternativas para seguir volando.

La aerolínea de bandera Aeroflot y otras compañías sufrían la represión occidental mientras los efectos de las sanciones por la invasión rusa de Ucrania se extienden por el sector de la aviación mundial.

Estados Unidos dijo a última hora del martes que seguirá el ejemplo de la Unión Europea y Canadá en la prohibición de vuelos rusos en su espacio aéreo, en una medida que probablemente desencadenará las represalias rusas.

Boeing dijo que había "suspendido las principales operaciones" en Rusia, donde también tiene centros de investigación e ingeniería.

Airbus anunció la detención del suministro de piezas y servicios a las aerolíneas rusas y dijo que también está analizando si su centro de ingeniería de Moscú podría seguir prestando servicios a los clientes locales. No dijo qué tipo de trabajos podría implicar esto.

Rusia representaba el 6% de la capacidad aérea en 2021, según la consultora IBA. Sus aerolíneas tienen un total de 332 aviones Boeing y 304 Airbus, es decir, cerca de dos tercios de la flota rusa, según los datos de Cirium Fleets.

La rapidez con la que se queden sin piezas dependerá de la cantidad de artículos críticos que tengan las aerolíneas. Los aviones están sometidos a una supervisión constante que va desde las revisiones diarias hasta el mantenimiento intensivo cada seis años.

Aunque los problemas rutinarios pueden no requerir reparaciones inmediatas, siempre que el problema se solucione en un número determinado de días, algunas piezas siguen siendo esenciales para que un avión pueda partir.

Los aviones de las aerolíneas rusas pueden volar dentro del país mientras tengan suficientes piezas en stock, pero las compañías podrían tener problemas para conseguir que los aparatos sean reparados en las zonas del mundo -cada vez más reducidas- que todavía aceptan sus aviones, dijeron expertos en mantenimiento.

Incluso aunque las piezas puedan encontrarse fuera del país, las compañías aéreas enfrentan posibles dificultades de pago después de que algunos bancos rusos fueran excluidos del sistema de pagos internacionales SWIFT.

"Tendrá que crear un sistema de mantenimiento completo para algunos tipos de aviones. Pero antes (...) tendrá que canibalizar algunos aviones para utilizarlos como piezas de repuesto", dijo Oleg Panteleev, jefe de la agencia analítica rusa AviaPort. "La canibalización será posible porque la necesidad de los aviones disminuirá".

Muchas compañías aéreas reutilizan las piezas de sus propias naves, pero en el pasado se ha denunciado que aerolíneas en dificultades de otros países han tomado piezas de aviones alquilados, lo que está prohibido.

Los arrendadores tienen hasta el 28 de marzo para liquidar los contratos en virtud de las sanciones de la UE, pero los ejecutivos del sector han expresado su preocupación sobre si las aerolíneas y los tribunales rusos cumplirán las normas.

Unos 515 aviones en Rusia están alquilados a empresas extranjeras, según Cirium. Hasta ahora no hay indicios de que las aerolíneas rusas hayan retirado piezas de los aviones arrendados sin autorización.

(Reporte de Jamie Freed en Sídney, David Shepardson en Washington, Tim Hepher en París y Reuters en Moscú; reporte adicional de Alexander Cornwell en Dubái e Ilona Wissenbach en Berlín; escrito por Jamie Freed y Tim Hepher; editado en español por José Muñoz y Carlos Serrano)