En un comunicado, Gasum dijo que no había recibido ninguna información sobre el asunto de la rusa Gazprom Export o del operador de transmisión ruso, pero que se estaba preparando para un escenario en el que Moscú cortara el gas a última hora del viernes o el sábado.

Gazprom no respondió a una solicitud de comentarios.

"Gasum seguirá preparándose para la situación junto con sus clientes y las autoridades nacionales responsables del suministro de emergencia", dijo.

Según la agencia de noticias Interfax, las exportaciones de gas ruso a Finlandia alcanzaron una media de unos 3,2 millones de metros cúbicos diarios entre el 1 de enero y el 16 de marzo.

El presidente de Finlandia, Sauli Niinisto, y la primera ministra, Sanna Marin, declararon la semana pasada que Finlandia solicitaría su ingreso en la alianza de defensa occidental, la OTAN, "sin demora", lo que provocó la respuesta de Rusia.

El presidente ruso, Vladimir Putin, ha exigido a los países que califica de "poco amistosos" que paguen el gas en rublos o que se les corte el suministro, y Moscú interrumpió el suministro a Bulgaria y Polonia en abril después de que se negaran a hacerlo.

La Comisión Europea ha dicho que los países no deben pagar en rublos, y que cumplir con la petición de Rusia podría infringir las sanciones de la Unión Europea contra Moscú por sus acciones en Ucrania.

Gasum dijo anteriormente que no aceptaría la exigencia de Gazprom Export de pagar en rublos y que, por lo tanto, aumentaba el riesgo de que los flujos de gas ruso a Finlandia se detuvieran.

El viernes pasado, el comité de preparación para emergencias de Finlandia dijo que estaba preparado para hacer frente al caso de que Rusia cortara su suministro de gas natural.

Finlandia importa la mayor parte de su gas de la vecina Rusia, pero el gas sólo representa un 5% de su consumo energético anual.