El grupo de moda italiano OTB se ha unido a un consorcio formado por los pesos pesados del sector del lujo LVMH , Prada y Cartier, propiedad de Richemont, que utiliza la tecnología blockchain para rastrear el origen de los productos de alta gama y luchar contra las falsificaciones.

La plataforma, bautizada como Aura, permitirá a los consumidores seguir el ciclo de vida de un producto accediendo a una especie de base de datos digital que almacena la información de manera que no pueda ser modificada, manipulada o pirateada.

La iniciativa, lanzada en abril y un raro caso de colaboración entre marcas rivales, pretende mejorar la transparencia sobre dónde y cómo se fabrican los productos de lujo, y también proporcionar a los propietarios certificados de autenticidad.

OTB -que significa Only The Brave- es propietaria de marcas como Diesel, Maison Margiela, Marni y Viktor&Rolf y adquirió Jil Sander en marzo. (Reportaje de Silvia Aloisi. Edición de Mark Potter)