El Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz (SIPRI) señaló en un informe que los grupos estadounidenses de la lista aumentaron sus ventas un 2,5% en total respecto al año anterior, hasta 317.000 millones de dólares. Los líderes del mercado, Lockheed Martin y RTX, registraron sin embargo ventas de armas ligeramente inferiores.
El aumento se produjo tras una caída del 3,5% en las ventas de armas en 2022, que el SIPRI ha achacado a la escasez de mano de obra, las interrupciones en la cadena de suministro y el aumento de los costes, que dificultaron a muchas empresas satisfacer la creciente demanda impulsada por la invasión rusa de Ucrania.
Las empresas europeas de la lista -excluidas las rusas- mantuvieron prácticamente sin cambios sus ventas combinadas en 2023, que ascendieron a 133.000 millones de dólares, pero la entrada de pedidos aumentó y algunos grupos experimentaron un repunte de la demanda vinculado a la guerra de Ucrania.
A principios de este año, el SIPRI informó de un aumento del 7% en el gasto militar mundial en 2023, el incremento anual más pronunciado desde 2009.
"En general, los productores más pequeños fueron más eficientes a la hora de responder a la nueva demanda vinculada a las guerras de Gaza y Ucrania, las crecientes tensiones en Asia Oriental y los programas de rearme en otros lugares", señaló el SIPRI.
Los grupos rusos de la lista, incluida la empresa estatal Rostec, protagonizaron la mayor subida combinada: un 40% hasta los 26.000 millones de dólares.
"Los ingresos por armamento de los 100 principales productores de armas aún no reflejan plenamente la magnitud de la demanda, y muchas empresas han lanzado campañas de reclutamiento, lo que sugiere que son optimistas sobre las ventas futuras", declaró Lorenzo Scarazzato, investigador del SIPRI.