En varias ocasiones en los últimos tiempos, especialmente en SAP SE: Lo que dicen las cifras y SAP SE: Situación de riesgo, los analistas de Markethan expresado sus reservas sobre los resultados económicos reales de SAP.
El lento crecimiento, la continua compresión de los márgenes y la rentabilidad decididamente dudosa de las operaciones de crecimiento externo del grupo -a pesar de los 25.000 millones de euros invertidos en adquisiciones a lo largo del ciclo de diez años- eran, en efecto, motivo de preocupación.
Como hemos visto, el mercado no compartía nuestros temores. El precio de la acción se ha duplicado en dos años, en gran parte como resultado de la irrupción de SAP en la nube, que ya es una realidad tras un notable retraso. Este avance es tanto más bienvenido cuanto que se produjo en un mercado bursátil alemán sacudido por los contratiempos.
Las ventajas competitivas de SAP son bien conocidas. Su paquete de software ERP se presenta a menudo como un auténtico "canon" de la actividad económica, tan omnipresente está en todas partes y tan dependientes son de él sus clientes.
Nuestros analistas, sin embargo, confesarán que les cuesta sentirse confiados. Bien acogidos por el mercado, los últimos resultados semestrales del Grupo publicados este verano muestran un beneficio antes de impuestos y partidas excepcionales estancado desde hace tres años.
Pero es cierto que también podemos optar por ver el vaso medio lleno. El beneficio de explotación de los seis primeros meses del año está en máximos históricos, al igual que la generación de flujo de caja libre, que ha mejorado notablemente.
El mercado, mientras tanto, ha elegido claramente su bando: el del vaso medio lleno. La valoración de SAP se ha disparado en los últimos trimestres, y ahora está muy por encima de su media histórica, e incluso a un múltiplo de beneficios superior al de Microsoft.