La volatilidad del comercio mundial hace que las previsiones sean muy inciertas, según la empresa, que también citó el difícil entorno empresarial en sus principales mercados, pero también los posibles impulsos de los programas de inversión en infraestructuras estatales.
«Las consecuencias de los aranceles adicionales y los posibles efectos económicos de las inversiones en infraestructuras europeas y alemanas también dificultan la evaluación», añadió.
En el primer trimestre de 2025, las ventas de Bosch aumentaron un 4 % en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Por el contrario, su competidora alemana Schaeffler registró el miércoles una caída de los ingresos del 2,9 % en el primer trimestre, alegando la debilidad general del sector.
Bosch confirmó su objetivo de margen operativo del 7 % para 2026, aunque lo calificó de «extremadamente difícil».
Bosch añadió que espera que el número de puestos de trabajo en la empresa siga disminuyendo, especialmente en Alemania y Europa. (Información de Ilona Wissenbach y Christina Amann, redacción de Amir Orusov, edición de Ludwig Burger)
