La disputa en el consejo de administración de Rogers Communications Inc., en la que el presidente destituido está intentando recuperar el control, no parece que vaya a obstaculizar la compra de Shaw Communications por parte de la empresa de telecomunicaciones, por valor de 16.200 millones de dólares, según los analistas.

El jueves, el consejo de administración expulsó al presidente Edward Rogers, pero horas más tarde volvió con planes para destituir a los directores que actuaron en su contra.

La salida de Rogers coronó un periodo tumultuoso, durante el cual intentó sustituir al consejero delegado Joe Natale, una medida a finales de septiembre que le enfrentó a sus hermanas y a su madre, que respaldaban al consejero delegado en el consejo.

Los analistas de J.P.Morgan dijeron que esperaban que la batalla en la sala de juntas no eclipsara el calendario o el proceso de aprobación del acuerdo de compra de la pequeña rival Shaw.

"Mantenemos nuestra hipótesis de base de que Rogers podrá cerrar su adquisición transformadora de Shaw en el primer semestre de 2012 tras la desinversión de parte o la totalidad del negocio inalámbrico de Shaw", escribió J.P.Morgan en una nota a los inversores.

Aunque la oferta de la empresa por Shaw reforzaría su posición en el mercado canadiense de las telecomunicaciones, que está muy concentrado, ha suscitado el escrutinio de varios reguladores gubernamentales sobre si disminuirá la competencia.

Los analistas de Scotiabank señalan que esperan que la operación obtenga la aprobación de los organismos reguladores en el plazo previsto del primer semestre del próximo año. (Información de Uday Sampath en Bengaluru; edición de Sweta Singh y Arun Koyyur)