El fabricante de software industrial y trenes informó de que sus ingresos aumentaron un 11% hasta los 17.870 millones de euros (18.380 millones de dólares), superando las previsiones de los analistas de 17.470 millones de euros en un consenso reunido por la empresa.

Pero Siemens registró una pérdida neta para los accionistas de 1.660 millones de euros tras asumir un cargo no monetario de 2.800 millones de euros por rebajar el valor de su participación en Siemens Energy.

La pérdida, la primera pérdida trimestral de Siemens desde el cuarto trimestre de 2010, supuso que Siemens tuviera que recortar su previsión de beneficios por acción para todo el año hasta 5,33 a 5,73 euros por acción, desde los 8,70 a 9,10 euros anteriores.

Siemens posee una participación del 35% en la empresa de turbinas y energía eólica, que ha tenido dos años problemáticos desde que se escindió en 2020, con problemas operativos y pérdidas en su división de turbinas eólicas Siemens Gamesa.

El consejero delegado Roland Busch dijo que la demanda seguía siendo fuerte, a pesar de un entorno afectado por las sanciones a Rusia, la alta inflación y los efectos actuales de la pandemia.

"Capturamos oportunidades significativas en un entorno de mercado con una alta demanda continua", dijo en un comunicado.

"Nuestro fuerte impulso en las líneas superiores continuó, con un crecimiento comparable de los pedidos del 20% desde el comienzo del ejercicio 2022".

Además del cargo de Siemens Energy, las cifras de la empresa también se vieron afectadas por 442 millones de euros en costes relacionados con su decisión de abandonar Rusia tras el conflicto en Ucrania.

Durante los tres meses hasta finales de junio, Siemens dijo que sus pedidos aumentaron a 22.070 millones de euros, superando las previsiones de 19.820 millones de euros. El aumento del 7% siguió a un incremento del 32% de los pedidos en el trimestre anterior.

El beneficio de su negocio industrial aumentó un 27%, hasta los 2.880 millones, por debajo de las previsiones de 3.020 millones de euros.

Siemens, cuyos productos se utilizan para equipar fábricas, edificios y redes de transporte, se considera un indicador de la economía industrial en general.

La demanda en el sector europeo de bienes de equipo se está manteniendo, dijo Barclays la semana pasada, al observar los resultados de otras empresas del sector como ABB y Schneider Electric

Siemens dijo que ha seguido evitando las grandes interrupciones causadas por los problemas de la cadena de suministro, especialmente en torno a la obtención de suficientes componentes, materias primas y logística.

(1 dólar = 0,9724 euros)