Indonesia está en conversaciones con varios países africanos, entre ellos Nigeria, para exportar y donar su vacuna casera COVID-19, dijo el viernes su promotor, tras convertirse en el primer país del sudeste asiático en aprobar una vacuna contra el COVID desarrollada internamente.

La aprobación indonesia de la inyección, cuyos datos detallados del ensayo aún no se han anunciado y que se basa principalmente en variantes de coroanvirus precedentes de Omicron, subraya el progreso en la investigación de vacunas y en la reducción de la dependencia de la tecnología extranjera.

"Con Indovac... es la oportunidad de Indonesia de donar", dijo a Reuters Honesti Basyir, director general de la empresa estatal Bio Farma, refiriéndose a la vacuna COVID recombinante de proteínas que fue aprobada por el regulador de medicamentos, BPOM, el mes pasado.

Bio Farma dijo que también había presentado documentos a la Organización Mundial de la Salud para una aprobación de la lista de uso de emergencia (EUL) para IndoVac, lo que permitiría que fuera donada a través de organizaciones como el esquema global de intercambio de vacunas COVAX.

Mientras tanto, Indonesia puede exportar la vacuna.

"No cierra la posibilidad de que exportemos, siempre que la aprobación de BPOM pueda ser aceptada por los reguladores locales", dijo Honesti, aunque añadió que la prioridad era vacunar primero a los indonesios.

Sin embargo, las perspectivas de exportación de la vacuna se ven limitadas, ya que las vacunas COVID tienen un exceso de oferta en todo el mundo e Indovac no está desarrollada para atacar la variante dominante Omicron.

Los países africanos tuvieron dificultades al principio de la pandemia para conseguir las vacunas COVID, ya que los países ricos acaparaban las dosis. Pero ahora muchos están bien abastecidos de vacunas y, en cambio, tienen problemas para administrarlas, ya sea por indecisión o por logística.

IndoVac, desarrollada conjuntamente con el Centro para el Desarrollo de Vacunas del Hospital Infantil de Texas en el Colegio de Medicina Baylor, está disponible como vacuna primaria para adultos en Indonesia.

Honesti dijo que se había empezado a investigar para hacer una versión dirigida a Omicron, y añadió que su desarrollo de la vacuna COVID había dado a Indonesia la confianza necesaria para reducir la dependencia de la tecnología extranjera.

Bio Farma tiene previsto producir 20 millones de dosis de IndoVac este año, pero el suministro final depende de los planes de vacunación del gobierno.

Indonesia ha vacunado completamente a más del 63% de sus 270 millones de habitantes con vacunas fabricadas por Pfizer/BioNTech, Moderna y la china Sinovac Biotech.

Honesti dijo que Bio Farma había dejado de producir la vacuna de Sinovac el año pasado y que no estaba en proceso de conseguir más suministros de la empresa china, ya que se centra en IndoVac. (Reportaje de Stanley Widianto y Kate Lamb en Sydney; Edición de Miyoung Kim)