El plan de reconversión de Labriola para el antiguo monopolio telefónico, cargado de deudas, se centra en ceder el control de su preciada red de telefonía fija a la entidad crediticia estatal CDP, al tiempo que divide la empresa en varias unidades y atrae a nuevos inversores.

Mientras sigue adelante con su plan de reconversión y los problemas de valoración complican la cesión de la red, TIM lanzará en breve un concurso de belleza para seleccionar un socio para la denominada unidad de negocio TIM Enterprise, según las fuentes.

La empresa combina los servicios de conectividad del grupo telefónico para grandes clientes corporativos y la administración pública, así como las operaciones en la nube, la ciberseguridad y el Internet de las cosas.

En marzo, CVC hizo una propuesta no vinculante para una participación de hasta el 49% en la unidad. La aproximación valoraba la empresa en 6.000 millones de euros, incluyendo la deuda, un precio que TIM consideraba inadecuado, según habían dicho previamente las fuentes.

Otros actores, además de CVC, han expresado su interés después de que la unidad se presentara en una jornada de mercados de capitales en julio, dijo Labriola a los analistas el mes pasado, añadiendo que TIM trataría ahora de entender cómo "extraer el máximo valor de esta área".

Mientras tanto, las opiniones divergentes sobre el valor de los activos de telefonía fija de TIM que enfrentan al principal inversor de TIM, Vivendi, con el segundo mayor inversor del grupo, CDP, están complicando las conversaciones sobre la cesión de la red antes de las elecciones nacionales del 25 de septiembre.