Sin embargo, las ventas y los beneficios de la empresa superaron las expectativas de Wall Street. El fabricante de automóviles ha intensificado los recortes de precios y otros incentivos para vender sus inventarios de vehículos, lo que naturalmente ha lastrado los márgenes. El margen bruto de Tesla cayó al 18,1% en el periodo abril-junio, frente al 19,3% del trimestre anterior y el 26% del mismo periodo del año pasado.

El grupo afirmó estar centrado en la reducción de costes y el desarrollo de nuevos productos, advirtiendo de que "los retos de estos tiempos de incertidumbre" aún no son cosa del pasado. Añadió que la bajada de los precios de las materias primas y las desgravaciones fiscales del Gobierno estadounidense estaban contribuyendo a reducir los costes de producción por vehículo.

Un parcours ébouriffant

Un historial para disgusto de los vendedores a corto - Fuente: MarketScreener

"Musk dijo que la compañía seguiría bajando los precios para compensar el impacto de la subida de tipos en el poder adquisitivo de los hogares", señala el analista de automoción de AlphaValue Valentin Mory, que apunta que la principal decepción de la publicación viene de la generación de flujo de caja libre, "debido a los cambios menos favorables en el capital circulante, incluidos los registros de inventarios".

Objetivo de 1,8 millones de vehículos vendidos en 2023

Tesla confirmó el miércoles que espera entregar alrededor de 1,8 millones de vehículos este año, tras haber entregado 466.000 vehículos en todo el mundo en el periodo abril-junio, un récord para la empresa, que se está convirtiendo poco a poco en uno de los principales fabricantes mundiales de vehículos para el mercado de masas. Las ventas trimestrales ascendieron a 24.930 millones de dólares, frente a un consenso de 24.480 millones según datos de Refinitiv. El beneficio ajustado fue de 0,91 USD por acción, frente a los 0,82 USD esperados.

Al mismo tiempo, Elon Musk ha fijado nuevos objetivos para la inteligencia artificial (IA), incluido el software de conducción autónoma y el uso de robots humanoides en las fábricas. Tesla está en conversaciones preliminares con un gran fabricante de automóviles con vistas a obtener una licencia para su tecnología de conducción autónoma, según Musk.

Conducción autónoma

La conducción autónoma es el próximo caballo de batalla del empresario, tras los reveses sufridos en el pasado. El grupo pretende seguir presionando para conseguir mayores volúmenes de ventas a costa de los márgenes de beneficio. En cualquier caso, Musk considera que la llegada de la conducción autónoma "hará que todas estas cifras sean ridículas". No obstante, el ejecutivo rectificó. "La gente se ha reído un poco de mí, y quizá con razón, porque mis previsiones sobre la conducción autónoma total han sido optimistas en el pasado".