Por Rebecca Elliott y Paul Vigna 
  THE WALL STREET JOURNAL 

El consejero delegado de Tesla Inc., Elon Musk, dijo el miércoles que ha dejado de aceptar los bitcoin como pago por sus vehículos.

"Nos preocupa el rápido aumento del uso de los combustibles fósiles para la minería y las transacciones de bitcoin, especialmente el carbón", dijo Musk en Twitter.

El valor del bitcoin frente al dólar ha descendido más de un 5% tras el tuit de Musk.

Previamente este año, Tesla empezó a aceptar esta criptomoneda como pago por sus productos vendidos en Estados Unidos. La compañía además realizó una gran apuesta financiera por el bitcoin cuando adquirió moneda digital por valor de US$1.500 millones en el primer trimestre. Desde entonces, Tesla ha vendido parte de esos bitcoins, lo que elevó sus beneficios en el primer trimestre.

El director financiero de Tesla, Zach Kirkhorn, explicó que la empresa optó por invertir en el bitcoin cuando buscaba un lugar para guardar el dinero que no necesitaba inmediatamente con el fin de preservar liquidez pero también obtener un rendimiento.

Musk indicó que la compañía no venderá ningún bitcoin y que retomará el uso de la criptomoneda en las transacciones "en cuando la minería utilice una energía más sostenible". Tesla no respondió inmediatamente a las peticiones de comentarios.

La decisión anterior del grupo de aceptar los bitcoin impulsó a la moneda digital, que no era demasiado aceptada al principio. En 2014 y 2015, una serie de empresas, entre ellas Dell Technologies Inc., Microsoft Corp., Overstock.com Inc. y Expedia Group Inc., experimentaron con los pagos en bitcoin. Muchos la abandonaron por falta de uso, pero el año pasado, PayPal Holdings Inc. abrió su plataforma al bitcoin y permitió que millones de usuarios estadounidenses vendieran, compraran y tuvieran criptomonedas.

Las grandes dudas sobre la huella medioambiental del bitcoin están ligadas en gran medida a la forma en que se crea la criptodivisa. El bitcoin opera a través de una red de ordenadores conectados pero independientes que procesan transacciones a cambio del bitcoin recién acuñado. Esos ordenadores compiten entre sí para ganar esos bitcoin participando en una competición de alto consumo de energía para resolver un rompecabezas matemático al azar. Cuantos más ordenadores haya en la red, más difícil será el puzzle y más energía se necesitará para vencer a los demás ordenadores.

La minería de bitcoins consume unos 148 teravatios/hora de energía al año, según estimaciones de Cambridge Centre for Alternative Finance. Eso es más de lo que utiliza Suecia en un año. Sin embargo, el centro también dijo que la energía que emplea el bitcoin equivale a un año y medio de energía desperdiciada en Estados Unidos sólo por los aparatos que se dejan conectados a los enchufes.

"La criptomoneda es una buena idea a muchos niveles, y creemos que tiene un futuro prometedor, pero esto no puede ser a costa del medio ambiente", dijo Musk el miércoles en su tuit.

-Escriba a Rebecca Elliott a rebecca.elliott@wsj.com y a Paul Vigna a paul.vigna@wsj.com

Versión española de Noelia Urra noelia.urra-calzada@dowjones.com

Editado por RMR

(END) Dow Jones Newswires

May 13, 2021 03:07 ET (07:07 GMT)