Recortó las estimaciones de la demanda para la región de los Mercados Emergentes de Asia (sin China), señalando el riesgo de que se produzcan nuevos descensos si persiste el reciente aumento de las infecciones.

"Las restricciones a la movilidad en la región podrían ralentizar un poco la recuperación de la demanda, pero parece poco probable que la detenga durante un periodo prolongado, dados los resultados ampliamente positivos de los programas de vacunación en todo el mundo", dijo Barclays.

El banco espera que los precios del petróleo Brent y WTI se sitúen en una media de 66 dólares por barril y 62 dólares por barril, respectivamente, este año. Ve un aumento de 5 a 6 dólares por barril en 2021.

Los futuros del crudo Brent cotizaban en torno a los 65,23 dólares el barril, mientras que el West Texas Intermediate estadounidense se situaba en 62,17 dólares el barril durante las operaciones asiáticas del viernes. [O/R]

En su nota titulada "Cautious supply, healing demand", Barclays dijo que un rápido acuerdo para revivir e implementar el acuerdo nuclear de Irán podría plantear algún riesgo a la baja en su visión de los precios para la segunda mitad de 2021.

"Pero este escenario también podría implicar una reducción más lenta de las restricciones de la oferta por parte de la OPEP+, lo que podría suavizar el golpe a los precios", añadió.

Si Estados Unidos levantara las sanciones a Irán, el país de Oriente Medio podría aumentar los envíos de petróleo, lo que se sumaría a la oferta mundial.

Los inventarios mundiales de petróleo podrían normalizarse en gran medida en los próximos dos o tres meses, dada la reciente reducción de las existencias y el déficit previsto de unos 1,5 millones de barriles diarios en el segundo semestre, según el banco.

Un enfoque prudente por parte de los productores estadounidenses de petróleo ajustado y la continua contención de la OPEP+ contribuyen a la normalización de los inventarios, añadió.