Tokyu Corporation ha anunciado los resultados consolidados del primer trimestre finalizado el 30 de junio de 2017. En el trimestre, la empresa registró unos ingresos operativos de 283.583 millones de yenes, frente a los 269.939 millones de yenes de hace un año. El beneficio operativo fue de 28.848 millones de yenes, frente a los 22.889 millones de yenes de hace un año. El beneficio recurrente fue de 29.148 millones de yenes, frente a los 22.730 millones de yenes de hace un año. El beneficio atribuible a los propietarios de la empresa matriz fue de 20.342 millones de yenes o 33,50 yenes por acción, frente a los 18.629 millones de yenes o 30,37 yenes por acción de hace un año. Los ingresos antes de impuestos y participaciones minoritarias fueron de 29.200 millones de yenes, frente a los 23.400 millones de yenes de hace un año. El EBITDA fue de 49.800 millones de yenes, frente a los 44.200 millones de yenes de hace un año. El gasto total de capital fue de 41.700 millones de yenes frente a los 30.500 millones de yenes de hace un año. Para el año que termina el 31 de marzo de 2018, la compañía espera unos ingresos operativos de 1.145.400 millones de yenes, un beneficio operativo de 83.000 millones de yenes, un beneficio recurrente de 82.700 millones de yenes y un beneficio atribuible a los propietarios de la empresa matriz de 70.000 millones de yenes o 115,28 yenes por acción. Asimismo, la empresa prevé unos ingresos antes de impuestos y participaciones minoritarias de 97.100 millones de yenes, un EBITDA de 175.600 millones de yenes, un flujo de caja de las actividades operativas de 145.600 millones de yenes, una inversión de capital de 175.200 millones de yenes y una inversión total de capital de 189.100 millones de yenes.