Tokyu Corporation ha informado de los resultados consolidados de los nueve meses finalizados el 31 de diciembre de 2017. En los nueve meses, la empresa registró unos ingresos operativos de 841.552 millones de yenes, frente a los 825.453 millones de yenes de hace un año. El beneficio operativo fue de 69.194 millones de yenes, frente a los 66.449 millones de yenes de hace un año. El beneficio recurrente fue de 70.044 millones de yenes, frente a los 65.907 millones de yenes de hace un año. El beneficio atribuible a los propietarios de la empresa matriz fue de 62.388 millones de yenes, frente a los 57.824 millones de yenes de hace un año. El beneficio neto por acción fue de 102,73 yenes, frente a los 94,35 yenes de hace un año. El EBITDA fue de 135.300 millones de yenes, frente a los 133.800 millones de yenes de hace un año. Los gastos de capital fueron de 101.600 millones de yenes, frente a los 84.900 millones de yenes de hace un año. La compañía proporcionó una orientación de ganancias consolidadas para el año completo que termina el 31 de marzo de 2018. Para el año completo, la compañía espera ahora unos ingresos operativos de 1.139.400 millones de yenes, un beneficio operativo de 83.000 millones de yenes, un beneficio recurrente de 82.700 millones de yenes, un EBITDA de 174.300 millones de yenes y un beneficio atribuible a los propietarios de la empresa matriz de 70.000 millones de yenes y un beneficio neto por acción de 115,28 yenes. La empresa prevé unos gastos de capital de 182.200 millones de yenes y una depreciación y amortización total de 74.500 millones de yenes.