La solicitud provino de 3D Investment Partners, con sede en Singapur, que posee el 19,4% de Fuji Soft según los datos de Refinitiv y es también el segundo mayor accionista de Toshiba Corp.

Según la presentación de Fuji Soft, 3D dijo que la empresa necesitaría añadir directores externos para mejorar la supervisión, ya que la falta de conciencia de la dirección actual sobre los costes de capital había dado lugar a unos resultados flojos.

En una reunión anual de accionistas celebrada en marzo, 3D también propuso la incorporación de sus dos candidatos a la junta directiva. Uno de los nominados recibió el apoyo de casi el 40% de los accionistas a pesar de la oposición de Fuji Soft.

3D, que en ese momento poseía aproximadamente un 9%, ha duplicado su participación desde entonces. El fondo había propuesto una compra por parte de la dirección en el pasado.