Por Sean McLain 
   THE WALL STREET JOURNAL 
 

TOKIO -- La decisión de Toyota Motor Corp de crear una reserva de chips para sus coches dio resultado al auparla por encima de su rival General Motors Co en Estados Unidos por primera vez.

Pero el fabricante de coches japonés, cuyos concesionarios estadounidenses han tenido sus propios problemas, no está sacando pecho por su triunfo sobre el estadounidense.

Entre abril y junio, Toyota vendió 688.813 vehículos en el país, tan sólo 577 unidades más que GM, según datos de ambas compañías. Es la primera ocasión en la que una firma nipona alcanza la posición más alta en Estados Unidos, según la página web de venta de coches Edmunds.com, y se produce mientras se amplía el políticamente sensible déficit comercial estadounidense.

"Toyota cree que fue un caso inusual debido a las limitaciones de producción y otros factores", afirmó la portavoz Shino Yamada, que lo calificó de "evento de corto plazo en este trimestre".

Toyota apostó antes que la mayoría de los fabricantes de automóviles por una recuperación del mercado de Estados Unidos. Como resultado, la empresa redujo menos que otros la producción y pedidos de piezas, lo que la dejó mejor preparada para el actual repunte. Pero ni siquiera Toyota estaba del todo lista para la fiebre por la compra de coches.

En el florecimiento posterior a la pandemia en el país, el problema de los concesionarios no es encontrar clientes, sino hallar coches para vendérselos. Las factorías han sufrido por la escasez de piezas, en particular semiconductores que se emplean para todo, desde los motores a los mandos a distancia.

Ahí es donde Toyota tuvo ventaja este año.

Aprovechando la experiencia tras el devastador terremoto de 2011 en Japón, Toyota relajó la aplicación estricta de su sistema de producción basado en que las piezas se envían a las plantas cuando se necesitan. Explicó que creó una reserva de cuatro meses de chips y otros componentes.

Aunque otros fabricantes de coches cerraron centros de producción por la carestía, Toyota no se vio afectada, según la firma de análisis LMC Automotive. Las plantas de Toyota han funcionado a más del 90% de su capacidad en lo que va de año, frente a entre el 50% y el 60% de la mayoría de sus competidores, de acuerdo con los datos de LMC.

Los concesionarios de Toyota siguen lidiando con una grave escasez de vehículos, pero están mejor provistos que los de la competencia, con modelos como el todocaminos RAV4, el éxito de ventas de Toyota en Estados Unidos.

La capacidad de Toyota de mantener la ventaja en la producción probablemente determinará si se queda como el número uno en la segunda mitad de este año. La compañía dijo que sus plantas operan ahora con normalidad y rechazó hacer comentarios sobre suministros futuros de semiconductores.

Otras firmas indican que la escasez no mejorará pronto.

Ford Motor Co reducirá o detendrá la producción en varias fábricas este mes. Mazda Motor Corp apuntó que tendrá que suspender la fabricación en su planta en Hofu, Japón, durante 10 días en julio.

--Chieko Tsuneoka contribuyó a este artículo

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July 06, 2021 09:52 ET (13:52 GMT)