El grupo bancario italiano sale de un año excepcional en un sector bancario europeo que se presenta sombrío.
El valor de mercado de Unicredit se ha cuadruplicado en los tres años transcurridos desde que su carismático Consejero Delegado, Andrea Orcel, antiguo Presidente de la división de banca de inversión de UBS y que en su día fue propuesto para hacerse con el control del Banco Santander, asumió el cargo.
Orcel había pronosticado un beneficio de 7.200 millones de euros en 2023. Unicredit, que presentó ayer sus resultados anuales, lo hizo incluso mejor, logrando finalmente un beneficio de 8.600 millones de euros. El segundo prestamista italiano por detrás de Intesa devolverá todo este beneficio a sus accionistas a través de recompras de acciones y dividendos.
A diferencia de BNP Paribas y Barclays, que han anunciado que esperan que 2024 sea un año difícil, Unicredit cree que podrá repetir sus resultados de 2023 en los próximos doce meses. La curiosa lentitud del sector bancario italiano a la hora de repercutir las subidas de tipos a sus clientes -un lujo que el mercado británico, mucho más competitivo, nunca podría permitirse- explica en parte esta confianza.
Otra razón menos obvia es la elevadísima proporción de productos de renta fija y basados en comisiones en la cartera de Unicredit, así como las ganancias adicionales que se obtendrán del programa de reestructuración aún en curso, cuya finalización está prevista para finales de este año.
En cualquier caso, es un premio gordo para Andrea Orcel, que durante mucho tiempo ha sido el niño mimado del sector bancario europeo y de los periodistas que le siguen. En tres años bajo su dirección, Unicredit habrá devuelto a sus accionistas un total de 17.600 millones de euros, más que la capitalización bursátil del grupo cuando Orcel tomó el timón.
Unicredit parece haber abandonado sus planes de consolidar el mercado nacional mediante la adquisición de BPM. Sin embargo, ha entrado en Grecia y ha reforzado su cabeza de puente en Rumanía con la adquisición de Alpha Bank. El grupo italiano también sigue muy bien implantado en Austria -donde es líder del mercado- y en Europa Central.
Queda por resolver el espinoso asunto de Rusia. Al final de la crisis del euro, Unicredit apostó fuerte por el país de Vladimir Putin para restaurar su imagen. Ahora está dando largas a su salida del país, por lo que algunos activistas le critican fervientemente. Iniciada por Orcel, esta retirada progresiva debería costar a Unicredit al menos 300 millones de euros de aquí a 2024.
UniCredit S.p.A. es uno de los principales grupos bancarios europeos. Los ingresos se desglosan por actividad de la siguiente manera - banca corporativa, de inversión, financiera y de mercados (51%): leasing, factoring, operaciones bursátiles, participación en los mercados de tipos, de cambios, de acciones y de derivados, intermediación bursátil, etc; - banca minorista (49%). A finales de 2023, el grupo gestionaba 474.400 millones de euros en depósitos y 409.500 millones de euros en préstamos. Los productos y servicios se comercializan a través de una red de 3.082 sucursales situadas principalmente en Italia (1.950). Los ingresos (incluidos los intragrupo) se distribuyen geográficamente de la siguiente manera: Italia (44,7%), Alemania (22,3%), Europa Central (17,5%), Europa del Este (10,7%) y Rusia (4,8%).