Los analistas acogieron con satisfacción la luz verde del Banco Central Europeo para el segundo tramo de la recompra de UniCredit, diciendo que ponía de relieve un enfoque individualizado con implicaciones positivas para otros prestamistas como Nordea e ING.

La gran exposición de UniCredit a Rusia había parecido amenazar sus planes de distribución de capital cuando estalló el conflicto de Ucrania. UniCredit dijo en marzo que sólo ejecutaría la recompra en su totalidad si su ratio de capital básico se mantenía por encima del 13% a pesar del impacto de la crisis de Rusia.

Sin embargo, desde entonces, el banco ha completado una primera recompra de 1.580 millones de euros, readquiriendo el 7,4% de su propio capital social. En julio solicitó la autorización del BCE para el segundo tramo, sobre el que los accionistas votarán el 14 de septiembre.

"Dados los riesgos derivados de la exposición del banco a Rusia junto con la actual incertidumbre/riesgos macroeconómicos, creemos que la aprobación de la recompra es un voto de confianza para UniCredit", dijeron los analistas de Berenberg.

Las acciones de UniCredit ganaban un 3,8% a las 1121 GMT, superando la subida del 1,2% del índice bancario italiano.

La última recompra equivale a 32 puntos básicos del ratio de capital de máxima calidad de UniCredit, que se situaba en el 15,73% a finales de junio.

Bajo el mando del nuevo consejero delegado Andrea Orcel, antiguo jefe de banca de inversión de UBS, UniCredit se ha embarcado en una estrategia que busca maximizar el capital, generando 67 puntos básicos de capital en el segundo trimestre.

Orcel ha expresado su confianza en que UniCredit podrá replicar en 2022 el objetivo de distribución alcanzado sobre los beneficios de 2021 -que asciende a 3.750 millones de euros si se incluyen las dos recompras y los dividendos en efectivo- a pesar de la desaceleración económica.

"Tendrían que pasar muchas cosas en el frente macroeconómico para que el plan de distribución se venga abajo, en nuestra opinión", dijo el corredor Autonomous, añadiendo que la acción estaba barata incluso teniendo en cuenta la incertidumbre política en Italia antes de las elecciones anticipadas del 25 de septiembre.

UniCredit dijo que el BCE había aprobado la recompra tras analizar las proyecciones de capital del banco bajo supuestos conservadores y escenarios macroeconómicos adversos actualizados.

El BCE había dicho en junio que pediría a los bancos que tuvieran en cuenta una posible recesión al calcular sus trayectorias de capital, como parte de las discusiones con los supervisores sobre los planes de distribución de capital.

(1 dólar = 0,9979 euros)