NEUÖTTING (dpa-AFX) - En la disputa sobre los aerogeneradores en el bosque de Altotting, el ayuntamiento de Neuotting ha rechazado una petición ciudadana. La petición ciudadana contra los aerogeneradores no era admisible, decidió el ayuntamiento en una reunión especial celebrada el jueves por la noche. Los medios de comunicación habían informado al respecto.

Según ha explicado ahora el director gerente de la ciudad de Neuotting, Erich Nachreiner, el rechazo se basaba en la anulación de la llamada cláusula municipal por parte de los Bosques del Estado de Baviera en junio. Anteriormente, las autoridades locales tenían un derecho de veto de facto cuando se trataba de la construcción de aerogeneradores en los bosques estatales. El rechazo de los aerogeneradores en un referéndum celebrado en enero en el municipio de Mehring provocó un considerable revuelo político y preocupación por el futuro del megaproyecto.

Reducción de los aerogeneradores tras las protestas públicas

Diez de los 40 aerogeneradores previstos en aquel momento para el mayor parque eólico de Baviera iban a construirse originalmente en la zona de Neuotting. Tras las protestas públicas y un referéndum negativo en Mehring, el número de aerogeneradores se ha reducido ahora a 27. Cuántos aerogeneradores se construirán realmente en Neuotting depende ahora, entre otras cosas, del proceso de aprobación.

Heike von der Heyden, directora gerente de la empresa franco-alemana encargada del proyecto del parque eólico, Qair, se felicitó por la decisión de Neuotting. "Es una buena noticia para nosotros", declaró a la Agencia Alemana de Prensa.

Proyecto de prestigio del gobierno estatal

Por un lado, el parque eólico previsto es un proyecto de prestigio para el gobierno estatal, al que se ha acusado de no haber ampliado la energía eólica en el pasado. Por otro, pretende contribuir al abastecimiento energético del triángulo químico bávaro con miles de puestos de trabajo.

En junio, Hubert Aiwanger (Votantes Libres), ministro de Economía y presidente del Consejo de Supervisión de Bayerische Staatsforsten, explicó que la cláusula municipal había provocado retrasos considerables e incertidumbre en los proyectos eólicos del bosque estatal. Esto había puesto en peligro los objetivos de expansión de la energía eólica establecidos en la ley federal y adoptados por la política estatal.

No obstante, el derecho de las autoridades locales a opinar seguirá estando garantizado en el futuro. Además, Aiwanger anunció en junio que una ley obligaría en el futuro a los inversores a dar a las autoridades locales y a los ciudadanos una participación en los beneficios de las turbinas./sd/DP/mis