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El juez de quiebras de EE.UU. Sean Lane aprobó el plan de liquidación del Capítulo 11 de Genesis y desestimó una objeción planteada por DCG, que había argumentado que Genesis no debía pagar a sus clientes y acreedores más de lo que estaban valorados los criptoactivos en enero de 2023, cuando Genesis se declaró en quiebra.
Los precios de las criptomonedas han subido mucho desde que Genesis se declaró en quiebra, y DCG y Genesis discreparon sobre quién debía beneficiarse de la subida de los precios. El bitcoin, por ejemplo, valía 21.084 dólares en enero de 2023, frente a su precio actual de 67.000 dólares.
Lane rechazó la objeción de DCG, dictaminando que incluso si las reclamaciones de los clientes se limitaban a los precios más bajos, Genesis tendría que pagar a muchos otros acreedores, incluidos los reguladores financieros federales y estatales que habían hecho valer 32.000 millones de dólares en reclamaciones, antes de poder dar dinero a su accionista DCG.
"No hay ni de lejos suficientes activos para proporcionar alguna recuperación a DCG en estos casos", escribió Lane.
Genesis está devolviendo el dinero a sus clientes en criptomoneda en la medida de lo posible, pero no tiene suficiente criptomoneda para devolver todo lo que debe.
El abogado de Genesis, Sean O'Neal, dijo el viernes que la empresa no estaba de acuerdo con la afirmación de DCG de que se podría pagar a los clientes "en su totalidad" basándose en los precios más bajos de la criptodivisa en enero de 2023.
"No nos tragamos la idea de que las reclamaciones se limitan al valor de la fecha de petición", dijo O'Neal.
Génesis estimó en febrero que podría pagar a sus clientes hasta el 77% del valor de sus reclamaciones, dependiendo de las fluctuaciones futuras de los precios.
No fue posible contactar inmediatamente con DCG para que hiciera comentarios a última hora del viernes. (Reportaje de Dietrich Knauth; Edición de Sandra Maler y Leslie Adler)
