Las cifras del comercio chino de mayo encabezan el calendario de datos y acontecimientos económicos de Asia-Pacífico el miércoles, con los inversores deseosos de ver si se repite la sorprendente caída de las importaciones de abril, lo que ofrecerá pistas sobre la salud -o no- de la demanda interna.

Es posible que los mercados reciban un viento de cola de la sesión global del martes: Wall Street terminó al alza y la volatilidad cayó a mínimos prepandémicos, aunque el mundo de las criptomonedas se vio sacudido después de que la Comisión del Mercado de Valores de EE.UU. presentara una segunda demanda importante en otros tantos días contra gigantes del sector.

El miércoles también se publicarán las cifras de crecimiento del PIB del primer trimestre en Australia, que podrían dar un empujón al dólar australiano y a otros activos locales tras la sorprendente subida de los tipos de interés del banco central del país el martes.

Los analistas encuestados por Reuters estiman que la economía creció un 0,3% respecto al trimestre anterior y un 2,4% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Ambos marcarían un ritmo de crecimiento más lento que el del cuarto trimestre del año pasado.

El dólar australiano podría verse inmerso en una toma de beneficios el miércoles tras la fuerte subida del martes, la cuarta consecutiva, tras la subida de tipos del Banco de la Reserva de Australia y la señal de que habrá más.

Es la racha ganadora más larga del Aussie en un mes, y la divisa ha subido casi un 1% esta semana. No se apreciaba dos semanas seguidas desde enero.

Los datos comerciales chinos de mayo serán el principal foco de atención, especialmente las importaciones, que llevan más de un año de atonía. Se suponía que la supresión de las restricciones y bloqueos de la época de la pandemia a principios de este año estimularía un repunte de la demanda interna, pero no ha sido así.

La sorprendente caída del 7,9% de las importaciones en abril fue una importante señal de alarma de que la reapertura económica no iba según lo previsto. Fue uno de los principales catalizadores para que los inversores se volvieran bajistas sobre los activos chinos y la economía en las últimas semanas.

Los economistas encuestados por Reuters prevén una caída de las importaciones del 8,0% para mayo y un descenso de las exportaciones del 0,4%.

El yuan chino cayó el martes hasta un nuevo mínimo del año al situarse en 7,10 por dólar. Es probable que nuevos indicios de una economía en dificultades mantengan al yuan a la defensiva, aunque el superávit comercial global sea relativamente grande.

En general, los mercados llegan al miércoles en un buen momento. El índice de volatilidad CBOE -el llamado índice del miedo de Wall Street- cerró por debajo de 14,0 por primera vez desde febrero de 2020.

He aquí tres acontecimientos clave que podrían proporcionar más dirección a los mercados el miércoles:

- Balanza comercial de China (mayo)

- PIB de Australia (1er trimestre)

- Reservas de divisas - China, Japón, Indonesia