Las acciones australianas cayeron el lunes, arrastradas por los pesos pesados del sector financiero y los valores auríferos, al debilitarse el apetito por los activos de riesgo después de que el ataque de represalia de Irán contra Israel durante el fin de semana hiciera temer un conflicto regional más amplio.

El índice S&P/ASX 200 bajó un 0,5% hasta los 7.748,80 a las 1225 GMT, extendiendo sus pérdidas a una tercera sesión en medio de la preocupación por la pegajosa inflación estadounidense y el retroceso de las apuestas a una pronta bajada de los tipos de interés.

Irán lanzó drones explosivos y misiles contra Israel a última hora del sábado en represalia por un presunto ataque israelí contra su consulado en Siria el 1 de abril, un primer ataque directo contra territorio israelí que ha avivado el temor a un conflicto regional más amplio.

Los resistentes datos económicos estadounidenses, especialmente la lectura de la inflación de marzo, más alta de lo esperado, han obligado a los inversores a reajustar las expectativas sobre el calendario de recortes de tipos de la Reserva Federal este año.

En Sídney, los valores financieros sensibles a los tipos cayeron un 0,9%, ampliando su descenso a una cuarta sesión. Los "Cuatro Grandes" bancos bajaron entre un 0,5% y un 1%.

Los valores auríferos retrocedieron un 1,6%, encaminándose a su peor sesión en más de tres semanas. Northern Star Resources y Evolution Mining retrocedieron un 1,6% y un 0,6%, respectivamente.

Los valores tecnológicos siguieron a la baja a sus homólogos de Wall Street y cayeron un 1,5%. Block y Xero cedieron un 2,7% y un 1,7%, respectivamente.

Los valores sanitarios e inmobiliarios perdieron un 0,6% y un 0,4%, respectivamente.

Los valores mineros y energéticos avanzaron gracias a la fortaleza de los precios subyacentes de las materias primas, lo que limitó las pérdidas del índice de referencia.

Los gigantes mineros BHP Group, Rio Tinto y Fortescue subieron un 0,6%, un 1,6% y un 0,5%, respectivamente.

Compañías petroleras y gasísticas como Woodside Energy y Santos ganaron entre un 0,2% y un 0,4%, ya que se esperaba que los precios del petróleo subieran tras el ataque de Irán a Israel.

El índice de referencia neozelandés S&P/NZX 50 cayó un 0,9% hasta los 11.829,10 puntos.