Las acciones europeas se preparaban para una apertura bruscamente a la baja este viernes, después de que Israel lanzara ataques a gran escala contra Irán, lo que provocó un aumento del 7% en el precio del petróleo y una huida de los inversores de los activos de riesgo.
Los futuros del Euro STOXX 50, que siguen a las principales empresas de la zona euro, retrocedieron un 1,4%, mientras que los contratos sobre los índices de referencia de Alemania y Francia también caían más de un 1% cada uno.
Por su parte, los futuros del FTSE británico, con fuerte peso del sector petrolero, descendieron un 0,4%.