El índice de referencia británico FTSE 100 bajó el viernes, presionado por las pérdidas de los valores de defensa y los servicios públicos, mientras que Direct Line subió después de que Aviva acordara la compra de la aseguradora.

El FTSE 100 de primera categoría bajaba un 0,1%, mientras que el FTSE 250 de mediana capitalización subía un 0,3% a las 0945 GMT. Ambos índices están en camino de registrar ganancias semanales, con el índice de referencia listo para anotar una tercera semana consecutiva de ganancias.

Los servicios públicos lideraron las pérdidas, con un descenso del 0,8%, mientras que los valores aeroespaciales y de defensa cayeron un 0,7%.

Los bienes personales subieron un 2,5% para encabezar las ganancias sectoriales.

Direct Line saltó casi un 7,1% para liderar las ganancias del índice de mediana capitalización después de que la aseguradora Aviva acordara comprar a su rival más pequeño en un acuerdo edulcorado de 3.610 millones de libras (4.604 millones de dólares) en efectivo y acciones que creará la mayor aseguradora de hogar y automóvil del Reino Unido.

Por el contrario, AJ Bell fue el mayor lastre del índice de mediana capitalización y cayó un 3,8% después de que Deutsche Bank recortara la plataforma de inversión a "mantener" desde "comprar".

Spirax Group cayó un 2,2% después de que los analistas de JP Morgan rebajaran la calificación del fabricante de válvulas a "neutral" desde "sobreponderar".

Mientras tanto, el sector inmobiliario británico cobró más impulso en noviembre, con un aumento de los precios de la vivienda del 1,3% en noviembre respecto a octubre, más rápido de lo previsto, hasta alcanzar un récord histórico.

El ministro británico de Empresa y Comercio, Jonathan Reynolds, dijo en una entrevista que el país se pensará muy bien si toma represalias si la administración entrante de Donald Trump golpea al país con nuevos aranceles.

Los inversores nacionales se inquietaron después de que Trump propusiera aranceles generales del 10%-20% sobre prácticamente todas las importaciones, dado que el presidente electo de EE.UU. ya ha prometido grandes aranceles sobre Canadá, México y China.

La responsable política del Banco de Inglaterra, Megan Greene, dijo el jueves que no estaba claro si el aumento de los aranceles estadounidenses elevaría o reduciría la inflación británica.

Al otro lado del Atlántico, los inversores esperaban con impaciencia los datos mensuales sobre las nóminas, que podrían cuestionar o cimentar las apuestas a un recorte de tipos en Estados Unidos este mes.