La Bolsa de Madrid terminó ayer con una fuerte caída del 1,20%, hasta los 8655 puntos, debido a que los operadores experimentaron un súbito retorno de la aversión al riesgo ante un posible efecto dominó con la posible quiebra del gigante inmobiliario chino Evergrande.

El índice IBEX35, sin embargo, se benefició de algunas compras baratas en la segunda mitad de la sesión, tras un mínimo de 8690 puntos, antes de la apertura de Wall Street. 
En cuanto a las acciones, el Banco Santander ganó un 2,49%, beneficiándose, al igual que otros valores bancarios y aeroespaciales, de la reapertura de Estados Unidos a los viajeros. Mapfre ganó un 1,59% y BBVA un 1,54%. 
ArcelorMittal fue la que más cayó (-8,03%), seguida de Grifols (-0,95%) y Telefonia (-0,64%). 

Al igual que en Europa, los índices estadounidenses cerraron a la baja, pero redujeron ligeramente sus pérdidas al final del día. El Dow Jones perdió un 1,78%, hasta los 3.370 puntos, el S&P500 bajó un 1,7%, hasta los 4.357 puntos, y el Nasdaq100 perdió un 2,1%.

Hoy se espera que el IBEX35 abra un 0,1% al alza.
Técnicamente, la configuración sigue siendo claramente bajista en términos horarios por debajo de los 8800 puntos. La zona de los 8.600 puntos ha provocado hasta ahora una reacción positiva, pero habrá que esperar a que se supere el nivel de los 8.700 puntos para esperar una recuperación técnica más fuerte hacia el nivel de los 8.800 puntos.