La Bolsa de Madrid terminó el viernes con una fuerte caída del 1,31%, hasta los 8.664 puntos, penalizada por las malas cifras del informe mensual sobre el empleo estadounidense. El índice logró mantener una pequeña pérdida del -0,65% en la semana.

Aunque la tasa de desempleo bajó al 5,2% (5,4% anteriormente), sólo se crearon 235.000 puestos de trabajo, mientras que el mercado esperaba 720.000. Los ingresos por hora aumentaron un 0,6% (+4,3% interanual).
El índice ISM de servicios también decepcionó, situándose en 61,7 frente a los 64,1 del mes pasado.

En el ámbito del valor, Repsol subió un 0,78% y Siemens Gamesa un 0,60%, mientras que Grifols cedió un 0,76%, Arcelormittal un 1,59%, Telefónica un 0,56% y Cie automotive otro 0,55%. 

Al otro lado del Atlántico, los índices mostraron resistencia y cerraron mixtos. El Nasdaq100 ganó un 0,31% hasta los 15652 puntos, el S&P500 perdió un 0,03% hasta los 4535 puntos y el Dow Jones un 0,21% hasta los 35369 puntos. 

Esta mañana, se espera que el IBEX35 comience la semana con una tímida subida del 0,02%.

Desde el punto de vista técnico, el mercado parisino muestra algunos signos de fiebre. Ahora se favorece un sesgo bajista por debajo de los 90000 puntos y la media móvil de 20 horas está girando a la baja. La zona de los 8800 puntos tendrá que contener los impulsos bajistas o se arriesgará a nuevos descensos hacia los 8750/8700 puntos por extensión.