Tras otra sesión volátil, la Bolsa de Madrid terminó el viernes pasado con una subida del 0,85%, hasta los 8.584 puntos, lastrada al final de la sesión por el mal comportamiento de Wall Street. 

Entre los valores, Indra Sistemas ganó un 6,08%, Cie Automotive un 4,17%, Fluidra un 4,06% y Melia Hotels un 3,71%, mientras que Naturgy Energy perdió un 2,77% y BBVA un 2,67%. 

Al otro lado del Atlántico, los índices estadounidenses cayeron, penalizando un índice PCE básico que subió un 0,9% en marzo (0,5% en febrero), lo que representa un aumento del 6,6% en un año, un récord desde 1982. La caída del 14% de Amazon también pesó en el sector tecnológico, ya debilitado por la perspectiva de un fuerte endurecimiento de la política monetaria estadounidense. 

El Dow Jones cerró con un descenso del 2,77%, hasta los 3.277 puntos, el S&P500 perdió un 3,63%, hasta los 4.131 puntos, y el Nasdaq100 bajó un 4,47%. 

A la espera de la decisión de la Fed sobre los tipos de interés el miércoles, es probable que la semana comience en rojo, como sugieren los contratos de futuros que bajan un 0,96% para el IBEX35. 

El sábado, los PMI manufacturero y de servicios de China cayeron a sus niveles más bajos desde principios de 2020, con 47,4 y 41,9 respectivamente (frente a 49,5 y 48,4 el mes pasado), mostrando una clara contracción de la actividad. 

En datos horarios, el índice debería abrir en un hueco bajista por debajo de la zona de los 8400 puntos. Si se supera este nivel, estaría a favor de seguir despejando hacia los 8.300 puntos o incluso hacia los 8.200 puntos por extensión.