16 sep (Reuters) - El principal índice bursátil español cerró el viernes con una caída de más de un 1%, cediendo el nivel de los 8.000 puntos, mientras los inversores percibían las señales de una recesión que se aproxima.

Durante la jornada del viernes se conocieron los datos sobre la confianza de los consumidores en Estados Unidos, que mostró una caída mayor de lo previsto, añadiéndose a los miedos de una recesión global empujada por una inflación espoleada por la crisis energética.

Otros grandes organismos, como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, también avisaron de una desaceleración que se acerca, y los analistas apostaban por unas subidas de tipos agresivas por parte de los responsables de la política económica.

El selectivo bursátil español Ibex-35 cerró con una caída de 100,80 puntos el viernes, un 1,25%, hasta 7.984,70 puntos, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 perdió un 1,61%. 

En el sector bancario, Santander perdió un 0,97%, BBVA retrocedió un 1,19%, Caixabank cedió un 2,57%, Sabadell cayó un 3,77%, y Bankinter se dejó un 2,72%. 

Entre los grandes valores no financieros, Telefónica retrocedió un 1,03%, Inditex avanzó un 0,13%, Iberdrola se revalorizó un 0,38%, Cellnex cayó un 5,00% y la petrolera Repsol perdió un 3,00%.

La empresa de defensa Indra se situaba a la cabeza del tablero tras el anuncio de que el Gobierno de España permitía al fondo extranjero Amber Capital elevar su participación en la empresa española, lo que la convertiría en el segundo mayor accionista por detras de SEPI.

(Información de José Muñoz; editado por Emma Pinedo)