Una Reserva Federal cautelosa ha enfriado las expectativas de recortes de tasas de interés, dejando a los inversores en vilo mientras navegan por un panorama turbio de tensiones geopolíticas, riesgos inflacionarios y el inminente lastre al crecimiento derivado de los aranceles del presidente estadounidense Donald Trump.

La Fed mantuvo el miércoles sin cambios la tasa de interés de referencia, como se esperaba. Si bien los responsables de política monetaria reafirmaron que prevén cierta reducción en los costos de endeudamiento este año, moderaron el ritmo anticipado de futuros recortes debido al potencial de una inflación más alta ante la incertidumbre sobre los planes arancelarios propuestos por la administración Trump.

"La calma que muestra la Fed debería tranquilizar a los inversores, pero al mismo tiempo refleja la increíble incertidumbre que tenemos sobre todos los datos que siguen llegando", señaló Bob Savage, estratega jefe de mercados en BNY.

El miércoles, los inversores se aferraron a las expectativas de dos recortes de un cuarto de punto en las tasas este año, en línea con la previsión mediana de los funcionarios de la Fed encargados de fijar las tasas. Los operadores de futuros sobre tasas apostaban en gran medida por un recorte entre septiembre y octubre, y un segundo en diciembre.

El mercado sigue en tensión después de que la Fed ajustara levemente al alza su previsión de inflación para este año. Los funcionarios revisaron las expectativas de inflación al 3% para 2024, frente al 2,7% del pronóstico anterior, según el resumen de proyecciones económicas de junio de la Fed. Las previsiones de crecimiento económico para 2025 se revisaron a 1,4%, frente al 1,7% proyectado en marzo.

A la par de las expectativas económicas más moderadas de la Fed, una crisis cada vez más profunda en Oriente Medio y su potencial para elevar los precios de la energía eclipsaron un dato de inflación subyacente de mayo más suave, que había brindado cierto alivio al mercado.

"No hay muchos factores que sugieran que la inflación va a desplomarse a cero o a negativo, así que el sesgo sigue siendo al alza, y la Fed lo reconoce", afirmó Brad Long, director de inversiones en Fiducient Advisors.

Los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense subieron ligeramente después de que el presidente de la Fed, Jerome Powell, advirtiera en la conferencia de prensa del miércoles que la inflación de bienes podría repuntar este verano a medida que los aranceles comiencen a afectar a los consumidores. El S&P 500 cerró prácticamente plano el miércoles, cediendo las ganancias previas tras los comentarios de Powell.

Los responsables de política aún prevén recortar las tasas medio punto porcentual este año, como proyectaron en marzo y diciembre, pero ralentizaron ligeramente el ritmo posterior, previendo solo un recorte adicional de un cuarto de punto en cada uno de los años 2026 y 2027, en una prolongada lucha por devolver la inflación a su objetivo del 2%.

El número de funcionarios que proyectan ningún recorte de tasas este año aumentó en comparación con marzo, según el ampliamente seguido "diagrama de puntos" incluido en el resumen.

Robert Tipp, estratega jefe de inversiones en PGIM Fixed Income, consideró que el resultado fue restrictivo.

"Esta Fed está completamente enfocada en la inflación", aseguró.

"Están dispuestos a tolerar cierta debilidad en el crecimiento".

VERANO CALIENTE

Trump ha presionado en repetidas ocasiones para que se reduzcan las tasas de interés, pero el miércoles Powell advirtió que podría avecinarse una nueva ola de presiones sobre los costos, ya que las empresas de toda la cadena de suministro luchan por absorber los aranceles.

"Todos los pronosticadores externos y la Fed están diciendo... que esperamos que llegue una cantidad significativa de inflación en los próximos meses, y debemos tenerlo en cuenta", declaró el miércoles.

Mientras tanto, Trump afirmó la semana pasada que estaría dispuesto a extender el plazo del 8 de julio para concluir las negociaciones comerciales con países antes de que entren en vigor los aranceles estadounidenses más altos.

Blake Gwinn, jefe de estrategia de tasas en EE. UU. de RBC Capital Markets, señaló que la fecha límite de julio para los aranceles sigue siendo clave para los mercados.

"Si pienso en eventos de riesgo, ese es uno que se perfila como muy importante desde aquí", sostuvo.

Para los inversores, los datos de inflación de los próximos meses serán fundamentales, afirmó Michael Reynolds, vicepresidente de estrategia de inversión en Glenmede. "El panorama agregado que muestren... realmente informará a los inversores si veremos un repunte de apetito por el riesgo impulsado por los recortes de tasas y las expectativas de recortes, o si seguiremos en este patrón de espera e incertidumbre".

Aunque las perspectivas de inflación son inciertas, los indicadores económicos dibujan un panorama de desaceleración en la economía estadounidense.

El crecimiento del empleo ha perdido impulso en los últimos meses y el sector inmobiliario muestra nuevas señales de tensión. Los datos publicados el miércoles revelaron que los inicios de construcción de viviendas se desplomaron casi un 10% en mayo, marcando su nivel más bajo desde los primeros días de la pandemia en 2020.

Stephen Dover, estratega jefe de mercados y director del Franklin Templeton Institute, comentó que veía oportunidades fuera de Estados Unidos debido a la incertidumbre política y las preocupaciones inflacionarias.

En el mercado de bonos, se mostró más positivo respecto a la deuda a corto plazo, ya que los aranceles complican las previsiones sobre la trayectoria a largo plazo de los bonos.

"Intentar predecir realmente lo que va a pasar con los aranceles es una tarea inútil", concluyó.