El S&P 500 y el Nasdaq finalizaron la jornada del viernes en terreno negativo, mientras los inversores se mantenían cautelosos ante la escalada del conflicto entre Irán e Israel de cara al fin de semana, en medio de la incertidumbre sobre una posible intervención de Estados Unidos.

La sesión estuvo marcada por una alta volatilidad. El S&P 500 también cerró la semana con pérdidas, aunque el Nasdaq logró un avance semanal.

Irán declaró que no negociará el futuro de su programa nuclear mientras esté bajo ataque de Israel, mientras que Europa intenta persuadir a Teherán para que retome las conversaciones.

La Casa Blanca informó el jueves que el presidente Donald Trump decidirá en las próximas dos semanas si Estados Unidos interviene en la guerra aérea entre Israel e Irán, aumentando la presión sobre Teherán para que negocie.

"Los inversores están un poco nerviosos a la hora de comprar acciones justo antes de esta situación y, más específicamente, justo antes de este fin de semana", afirmó Rick Meckler, socio de Cherry Lane Investments en New Vernon, Nueva Jersey.

Los ataques de Israel han estado dirigidos a limitar la capacidad de Teherán para desarrollar armas nucleares. Tras una semana de ofensiva, Israel aseguró haber alcanzado decenas de objetivos militares.

Las grandes tecnológicas, incluidas Nvidia, estuvieron entre los principales lastres para el S&P 500 y el Nasdaq.

El promedio industrial Dow Jones subió 35,16 puntos, o un 0,08%, hasta los 42.206,82 puntos; el S&P 500 perdió 13,03 puntos, o un 0,22%, hasta los 5.967,84 puntos; y el Nasdaq Composite cayó 98,86 puntos, o un 0,51%, hasta los 19.447,41 puntos.

En el balance semanal, el Dow apenas registró cambios, el S&P 500 retrocedió un 0,2% y el Nasdaq avanzó un 0,2%.

El volumen negociado el viernes fue superior al promedio reciente. La jornada coincidió con un evento de "triple vencimiento", que es la expiración simultánea de opciones sobre acciones, futuros sobre índices bursátiles y opciones sobre índices, fenómeno que ocurre una vez cada trimestre.

El volumen en las bolsas estadounidenses alcanzó los 20.910 millones de acciones, frente a un promedio de 18.060 millones en las últimas 20 sesiones completas.

Los inversores también analizaron los comentarios de funcionarios de la Reserva Federal después de que el organismo mantuviera las tasas de interés sin cambios el miércoles y de que su presidente, Jerome Powell, advirtiera que la inflación podría repuntar durante el verano a medida que los aranceles impuestos por Trump se trasladen a los consumidores.

El gobernador de la Fed, Christopher Waller, consideró que el riesgo inflacionario derivado de los aranceles es bajo y que el banco central debería recortar las tasas en su próxima reunión. Por su parte, Tom Barkin, presidente de la Fed de Richmond, adoptó una postura más cautelosa y señaló que no hay urgencia para reducir las tasas.

Las acciones de Kroger subieron un 9,8% después de que la cadena de supermercados mejorara su previsión de crecimiento anual de ventas.

Por el contrario, los títulos de Accenture cayeron un 6,9% tras anunciar una disminución de nuevas contrataciones en el tercer trimestre.

En la Bolsa de Nueva York, los valores en descenso superaron a los que subieron en una proporción de 1,1 a 1. Se registraron 102 nuevos máximos y 59 nuevos mínimos.

En el Nasdaq, 1.894 valores subieron y 2.651 retrocedieron, lo que supone una relación de 1,4 a 1 a favor de los descensos.