LONDRES, 21 jul (Reuters) - La Bolsa de Metales de Londres debería reconsiderar su decisión de no prohibir el aluminio ruso en su red de almacenes, ya que los grandes volúmenes están poniendo en peligro el estatus de referencia de su contrato de aluminio, dijo el productor Norsk Hydro en una carta esta semana.

El aluminio ruso representó el 80% de los inventarios de aluminio disponibles en los almacenes registrados en la LME en junio, frente al 68% de mayo, el 41% de enero y menos del 18% del pasado octubre.

Aunque no hay sanciones internacionales sobre el metal ruso, muchos consumidores rehúyen el aluminio producido por Rusal, que representa el 6% del suministro mundial. Los aranceles estadounidenses a la importación de aluminio y productos rusos también están incitando a algunos consumidores a "autosancionarse".

Según Norsk Hydro, algunos analistas estiman el descuento del aluminio ruso entre 100 y 300 dólares por tonelada métrica.

En la carta, vista por Reuters, el productor noruego de aluminio pedía al mayor y más antiguo foro mundial de comercio de metales que reconsidere su decisión del año pasado de mantener el aluminio ruso en el sistema de la LME.

También preguntaba si la LME había consultado u obtenido alguna orientación de la Autoridad de Conducta Financiera británica (FCA) sobre los riesgos para el "funcionamiento ordenado" del mercado del aluminio ruso.

La LME dijo que seguiría reflejando todas las sanciones y aranceles gubernamentales pertinentes, y que vigilaría cualquier preocupación sobre el orden del mercado con respecto al metal ruso.

"Observamos que todos los metales de origen ruso siguen siendo consumidos por una amplia sección del mercado, y permaneceremos vigilantes con respecto a este asunto", dijo la LME en un comentario enviado por correo electrónico.

Como los precios del aluminio en la LME están referenciados en los contratos entre consumidores, productores y comerciantes, el dominio del aluminio ruso en el sistema es un problema, dijo el Director Financiero de Norsk Hydro, Paal Kildemo.

"Si eres un consumidor que quiere cubrir su exposición en la LME y el 80% es aluminio ruso, deberías plantearte utilizar otro mercado", dijo Kildemo a Reuters. "Sigue existiendo el riesgo de que se entregue aún más aluminio ruso a la LME, lo que pesará aún más sobre el precio de referencia (...) Hay un riesgo claro de que el mercado, apoyado por la LME, sea cada vez más desigual".

El aluminio también cotiza en la Bolsa de Futuros de Shanghai (ShFE), pero no es fácil negociarlo debido a los controles de divisas y capitales y a las restricciones impuestas a los extranjeros, que deben estar afiliados a una empresa china.

Los volúmenes de negociación del aluminio en la Bolsa de Chicago (CME) llevan más de un año aumentando. En mayo crecieron más de un 150% interanual, según datos de la CME.

Sin embargo, en octubre del año pasado, el responsable de metales del operador bursátil CME Group afirmó que no bloquearía el metal ruso a menos que las normas gubernamentales le obligaran a hacerlo.

"Hydro es a la vez productor y comprador en el mercado del aluminio y dependemos en gran medida de un mercado que funcione bien para la determinación de los precios", afirma la empresa en la carta, en la que también pregunta por el papel de la FCA en la toma de decisiones en la LME.

Hydro dijo en la carta que le gustaría saber si los límites a las cantidades de metal ruso o la suspensión de las entregas a los almacenes de la LME serían considerados por la FCA como una forma adecuada de mitigar los riesgos para un mercado ordenado.

La FCA y Rusal no respondieron a las peticiones de comentarios de Reuters.

(Reporte de Pratima Desai, Polina Devitt y Eric Onstad; Editado en Español por Ricardo Figueroa)