Los futuros del crudo Brent subieron 24 centavos, o un 0,3%, hasta los 77,16 dólares el barril a las 0138 GMT. Los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate ganaron 26 centavos, o un 0,4%, hasta los 74,18 dólares.
En las tres semanas que terminaron el 10 de enero, el Brent ha avanzado un 5,9%, mientras que el WTI ha saltado un 6,9%.
Los analistas de JPMorgan atribuyeron las ganancias a la creciente preocupación por las interrupciones del suministro debidas al endurecimiento de las sanciones, en medio de las bajas reservas de petróleo, las gélidas temperaturas en muchas partes de EE.UU. y Europa y la mejora del sentimiento respecto a las medidas de estímulo de China.
La oficina meteorológica estadounidense prevé que las zonas central y oriental del país experimenten temperaturas por debajo de la media. Muchas regiones de Europa también se han visto afectadas por el frío extremo y es probable que sigan experimentando un comienzo de año más frío de lo habitual, lo que los analistas de JPMorgan esperan que impulse la demanda.
"Prevemos un aumento interanual significativo de la demanda mundial de petróleo de 1,6 millones de barriles diarios en el primer trimestre de 2025, impulsada principalmente por... la demanda de gasóleo de calefacción, queroseno y GLP", afirmó JPMorgan en una nota el viernes.
Mientras tanto, la prima del contrato Brent a un mes sobre el contrato a seis meses alcanzó esta semana su nivel más alto desde agosto, lo que podría indicar una escasez de la oferta en un momento de aumento de la demanda.
Los precios del petróleo han subido a pesar de que el dólar estadounidense se ha fortalecido durante seis semanas consecutivas. Un dólar más fuerte suele pesar sobre los precios, ya que encarece las compras de crudo fuera de Estados Unidos.
Los suministros podrían verse aún más afectados, ya que se espera que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anuncie esta semana nuevas sanciones contra la economía rusa, en un intento de reforzar el esfuerzo bélico de Ucrania contra Moscú, antes de que el presidente electo, Donald Trump, tome posesión de su cargo el 20 de enero. Hasta ahora, un objetivo clave de las sanciones ha sido la industria petrolera rusa.