Los futuros del crudo Brent subían 12 centavos, o un 0,2%, hasta los 72,43 dólares el barril a las 0103 GMT, mientras que los futuros del crudo estadounidense se situaban en los 68,70 dólares el barril, con una subida de 16 centavos, o un 0,2%.
Ambas referencias cayeron casi un 2% el miércoles.
Es probable que la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados de la OPEP+ amplíen su última ronda de recortes de la producción de petróleo al menos tres meses más a partir de enero, cuando se reúna en línea el jueves a las 1100 GMT, según dijeron fuentes de la OPEP+ a Reuters, para proporcionar un apoyo adicional al mercado petrolero.
La OPEP+ ha estado buscando reducir gradualmente los recortes de suministro hasta el próximo año.
"Los participantes en el mercado están muy atentos para ver si la OPEP+ se centrará en apuntalar los precios ampliando los recortes de producción, u optará por defender su cuota en el mercado mundial del crudo suavizando dichos recortes", afirmó Satoru Yoshida, analista de materias primas de Rakuten Securities.
"La decisión de la OPEP+ puede provocar una reacción a corto plazo, pero es probable que el mercado del petróleo suba a finales de año por las expectativas de una recuperación económica de EE.UU. bajo la administración Trump y las continuas tensiones en Oriente Próximo", dijo.
Una reducción mayor de la esperada en las reservas de crudo de EE.UU. la semana pasada también proporcionó cierto apoyo a los precios.
Las existencias estadounidenses de crudo cayeron más de lo previsto la semana pasada, ya que las refinerías aumentaron sus operaciones, según informó la Administración de Información Energética (EIA). Las existencias de gasolina y destilados aumentaron más de lo previsto durante la semana.
En Oriente Próximo, el Hezbolá libanés ha sido degradado militarmente de forma significativa por Israel, pero el grupo respaldado por Irán intentará probablemente reconstruir sus arsenales y sus fuerzas y suponer una amenaza a largo plazo para Estados Unidos y sus aliados regionales, según dijeron a Reuters cuatro fuentes informadas sobre la inteligencia estadounidense actualizada.
Israel dijo el martes que volvería a la guerra con Hezbolá si su tregua se derrumba y que sus ataques se adentrarían más en Líbano y tendrían como objetivo el propio Estado.
Mientras tanto, el enviado de Donald Trump a Oriente Próximo ha viajado a Qatar e Israel para dar el pistoletazo de salida al impulso diplomático del presidente electo de Estados Unidos para ayudar a alcanzar un alto el fuego en Gaza y un acuerdo de liberación de rehenes antes de que asuma el cargo el 20 de enero, dijo a Reuters una fuente informada sobre las conversaciones.