El presidente Donald Trump sigue manteniendo la incertidumbre mundial sobre si Estados Unidos se unirá al bombardeo israelí contra instalaciones nucleares iraníes, mientras el conflicto entre Israel e Irán entró en su séptimo día este jueves.

En declaraciones a la prensa frente a la Casa Blanca, Trump se negó a decir si había tomado una decisión sobre la participación estadounidense en la campaña israelí. "Puede que lo haga. Puede que no lo haga. Quiero decir, nadie sabe lo que voy a hacer", afirmó.

Posteriormente, Trump comentó que funcionarios iraníes deseaban acudir a Washington para una reunión y que "podríamos hacerlo". Sin embargo, añadió: "Es un poco tarde" para tales conversaciones.

Los ministros de Relaciones Exteriores de Alemania, Francia y Reino Unido planean mantener conversaciones nucleares con su homólogo iraní el viernes en Ginebra, con el objetivo de persuadir a Irán para que garantice firmemente que su programa nuclear será utilizado exclusivamente con fines civiles, según una fuente diplomática alemana citada por Reuters.

Mientras continúan los esfuerzos diplomáticos, algunos residentes de Teherán, una ciudad de 10 millones de habitantes, colapsaron las autopistas el miércoles intentando huir de la intensificación de los ataques aéreos israelíes.

El Wall Street Journal informó que Trump habría comunicado a sus principales asesores que aprobó planes de ataque contra Irán, pero que aún no ha dado la orden final, esperando ver si Teherán abandona su programa nuclear.

Al ser preguntado sobre si creía que el gobierno iraní podría caer como resultado de la campaña israelí, Trump respondió: "Claro, cualquier cosa podría pasar."

Refiriéndose a la destrucción o desmantelamiento del centro de enriquecimiento nuclear de Fordow en Irán, Trump señaló: "Somos los únicos que tenemos la capacidad de hacerlo. Pero eso no significa que vaya a hacerlo, en absoluto."

Analistas militares consideran que Israel podría necesitar ayuda militar estadounidense para destruir Fordow, excavado bajo una montaña cerca de la ciudad de Qom.

El líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, de 86 años, reprendió a Trump en un discurso grabado transmitido por televisión, su primera aparición desde el viernes.

Los estadounidenses "deben saber que cualquier intervención militar de EE. UU. estará indudablemente acompañada de daños irreparables", declaró. "La nación iraní no se rendirá."

En sus últimos bombardeos, Israel afirmó que su fuerza aérea destruyó la sede de la policía iraní.

El ejército israelí indicó que las sirenas sonaron en el norte de Israel poco antes de las 2 a.m. hora local del jueves (23:00 GMT del miércoles) y que interceptó un dron lanzado desde Irán. Minutos después, afirmó haber interceptado otro dron en la zona del Valle del Jordán.

Las andanadas de misiles iraníes marcan la primera vez en décadas de guerra encubierta y conflicto por poderes que un número significativo de proyectiles disparados desde Irán ha penetrado las defensas, matando a israelíes en sus hogares.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en un video difundido el miércoles por su oficina, dijo que Israel avanzaba "paso a paso" hacia la eliminación de las amenazas que representan los sitios nucleares y el arsenal de misiles balísticos de Irán.

"Estamos golpeando los sitios nucleares, los misiles, las sedes, los símbolos del régimen", dijo Netanyahu.

Israel, que no es parte del Tratado de No Proliferación Nuclear, es el único país de Oriente Medio al que se le atribuye la posesión de armas nucleares. Israel ni lo confirma ni lo niega.

Netanyahu también agradeció a Trump, "un gran amigo del Estado de Israel", por apoyarlo en el conflicto, señalando que ambos mantenían contacto continuo.

Trump ha oscilado entre proponer un rápido fin diplomático a la guerra y sugerir que Estados Unidos podría unirse al conflicto.

En publicaciones en redes sociales el martes, Trump incluso reflexionó sobre la posibilidad de matar a Jamenei.

El presidente ruso, Vladímir Putin, al ser preguntado sobre cuál sería su reacción si Israel matara al líder supremo iraní con la ayuda de Estados Unidos, respondió el jueves: "Ni siquiera quiero discutir esa posibilidad. No quiero."

Una fuente familiarizada con las discusiones internas aseguró que Trump y su equipo consideran opciones que incluyen sumarse a Israel en ataques contra instalaciones nucleares iraníes.

La misión iraní ante Naciones Unidas ridiculizó a Trump en publicaciones en X, describiéndolo como "un belicista acabado aferrándose a la relevancia".

El ejército israelí comunicó que decenas de cazas israelíes habían atacado objetivos en Teherán y el oeste de Irán en las últimas 24 horas, en tres oleadas, alcanzando instalaciones de producción de materiales, componentes y sistemas de fabricación de misiles.

HUYENDO DE TEHERÁN

Arezou, una residente de Teherán de 31 años, contó a Reuters por teléfono que logró salir de la ciudad hacia la localidad turística cercana de Lavasan.

"La casa de mi amiga en Teherán fue atacada y su hermano resultó herido. Son civiles", relató. "¿Por qué estamos pagando nosotros el precio de la decisión del régimen de seguir un programa nuclear?"

En Israel, las sirenas volvieron a sonar al anochecer del miércoles, advirtiendo de nuevos misiles iraníes. Un automovilista resultó herido por restos de un misil, según informaron los servicios médicos israelíes. El ejército posteriormente aconsejó a los civiles que podían abandonar las áreas protegidas, señalando que la amenaza había pasado.

En la estación de tren de Ramat Gan, al este de Tel Aviv, personas yacían sobre colchones proporcionados por la ciudad o sentadas en improvisadas sillas de camping, con botellas de agua de plástico esparcidas por el lugar.

"Me siento asustada, abrumada. Especialmente porque vivo en una zona densamente poblada que Irán parece estar atacando, y nuestra ciudad tiene edificios muy antiguos, sin refugios ni espacios seguros", dijo Tamar Weiss, sosteniendo a su hija de cuatro meses.

Irán ha reportado al menos 224 muertos en ataques israelíes, en su mayoría civiles, pero no ha actualizado esa cifra en días.

Desde el viernes, Irán ha lanzado unos 400 misiles contra Israel, de los cuales unos 40 han superado las defensas aéreas, matando a 24 personas, todas ellas civiles, según las autoridades israelíes.

PRESIÓN

Irán ha estado explorando opciones para aumentar su capacidad de presión, incluyendo amenazas veladas de afectar el mercado mundial de petróleo restringiendo el acceso al Golfo a través del Estrecho de Ormuz, la arteria marítima más importante del mundo para el transporte de crudo.

Dentro de Irán, las autoridades buscan evitar el pánico y la escasez. Se han permitido circular menos imágenes de destrucción que en los primeros días de los bombardeos, cuando los medios estatales mostraban explosiones, incendios y apartamentos arrasados. Se ha impuesto una prohibición de filmar por parte del público.

El ministerio de comunicaciones anunció el miércoles que se impondrán restricciones temporales al acceso a internet para ayudar a evitar que "el enemigo amenace la vida y la propiedad de los ciudadanos".

La capacidad de Irán para responder con fuerza a Israel mediante ataques de milicias aliadas cerca de las fronteras israelíes ha sido limitada por los duros golpes que Israel ha asestado a los aliados regionales de Teherán --Hamás y Hezbolá-- en los conflictos de Gaza y Líbano desde 2023.