Los precios del petróleo se mantuvieron estables el viernes, ya que los inversores consideraron los últimos comentarios de la Reserva Federal de EE.UU. sobre los tipos de interés en medio de una inflación pegajosa, mientras que los signos de firmeza de la demanda estacional de combustible en EE.UU. prestaron apoyo.

Los futuros del crudo Brent subían 2 centavos a 81,38 dólares el barril a las 0315 GMT, mientras que los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) bajaban 1 centavo a 76,86 dólares.

Ambas referencias se establecieron en mínimos de varios meses el jueves, con los futuros del crudo Brent cerrando en su punto más débil desde enero y los futuros del crudo estadounidense alcanzando un mínimo de tres meses.

Los futuros del Brent se encaminaban a descensos semanales de más del 3%, mientras que los del WTI se preparaban para una caída de casi el 4% respecto a la semana pasada, ya que las continuas restricciones macroeconómicas en EE.UU. mantenían los precios en equilibrio.

"El sentimiento dolorido de la demanda debido a las perspectivas halconas de la Fed en cuanto a los tipos y el telón de fondo de unos tipos 'posiblemente más altos durante más tiempo' pesaron significativamente en los precios del petróleo esta semana", dijo Priyanka Sachdeva, analista de mercado senior de Phillip Nova.

Las actas publicadas el miércoles de la última reunión de política monetaria de la Fed mostraron que los responsables políticos se cuestionan si los tipos de interés actuales son lo suficientemente altos como para domar la obstinada inflación.

Algunos funcionarios dijeron que estarían dispuestos a volver a subir los costes de endeudamiento si la inflación repunta. Sin embargo, el presidente de la Fed, Jerome Powell, y otros responsables políticos han dicho desde entonces que consideran improbables nuevas subidas de tipos.

Unos tipos más altos podrían ralentizar el crecimiento económico y reducir la demanda de combustible.

Mientras tanto, el fortalecimiento de la demanda de gasolina en Estados Unidos ayudaba a estabilizar los precios antes del fin de semana festivo del Memorial Day, considerado el inicio de la temporada de conducción estival en Estados Unidos.

La demanda de gasolina en EE.UU. alcanzó su nivel más alto desde noviembre, según informó el miércoles la Administración de Información Energética (EIA). Eso ayudó a sostener el mercado, ya que los conductores estadounidenses representan alrededor de una décima parte de la demanda mundial de petróleo, "lo que convierte a la próxima temporada de conducción en un pilar de la recuperación del crecimiento de la demanda mundial", dijeron los analistas de ANZ en una nota.

Todas las miradas se centran ahora en la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, denominados conjuntamente OPEP+, que se reunirán el 1 de junio, donde se espera que debatan si amplían los recortes voluntarios de la producción de petróleo de 2,2 millones de barriles diarios.

"El mercado también se muestra tímido a la hora de adoptar una postura agresiva de cara a la reunión de la OPEP de la próxima semana, en la que se discutirá la política de suministro", añadieron los analistas de ANZ. (Reportaje de Georgina McCartney en Houston y Jeslyn Lerh en Singapur; Edición de Sonali Paul)