Putin, en su intervención en una reunión televisada de altos funcionarios dedicada a cuestiones energéticas, dijo también que la producción rusa de petróleo había disminuido un 1,8% en lo que va de año, hasta 195,7 millones de toneladas, un descenso debido en gran parte a los recortes de producción en virtud de los acuerdos de la OPEP+.
Asistieron a la reunión el viceprimer ministro Alexander Novak, responsable ruso de las cuotas de producción de la OPEP+, el ministro de Energía Sergei Tsivilev, el jefe adjunto de la administración presidencial, Maxim Oreshkin y el jefe del gigante del gas Gazprom, Alexei Miller.
Miller estuvo ausente de la delegación de Putin durante las conversaciones del presidente la semana pasada en Pekín, donde no se anunció públicamente ningún acuerdo adicional sobre petróleo y gas.
"A pesar de las sanciones y de la considerable volatilidad de los mercados energéticos mundiales y regionales, el complejo nacional de combustibles y energía se desarrolla de forma estable y se abren nuevas zonas de exportación", declaró Putin en la reunión.
"Y lo que es críticamente importante y prioritario para nosotros es que está satisfaciendo de forma fiable y plena las necesidades internas. La economía rusa crece, las necesidades aumentan y el complejo de combustibles y energía las satisface".
