27 ene (Reuters) - Los productos más importantes de Tesla este año y el próximo no serán los coches, dijo el miércoles su director general, Elon Musk, sino un software que los conduzca de forma autónoma y un robot humanoide que la compañía espera que ayude en la fábrica.
Las atrevidas promesas del multimillonario más conocido de la industria del automóvil eléctrico se enfrentan a grandes retos, tanto tecnológicos como normativos. Tesla y otras empresas de tecnología automovilística llevan años sin cumplir sus objetivos en materia de software de autoconducción.
"Me encanta el hecho de que estén forzando la marcha, pero creo que son demasiado agresivos", dijo el analista de Roth Capital Partners, Craig Irwin.
Musk ha forjado su trayectoria desafiando a los escépticos con negocios centrados en coches eléctricos y cohetes. Algunos conductores de Tesla compran paquetes de autoconducción de 12.000 dólares con la expectativa de que la autonomía total esté a la vuelta de la esquina, y 60.000 conductores de Tesla están probando el último software de autoconducción, unas magnitudes con la que otras empresas de software para vehículos autónomos sólo pueden soñar.
"Me sorprendería que no consiguiéramos una plena conducción autónoma más segura que la humana este año. Me sorprendería", dijo Musk, prediciendo que la autoconducción integral se convertiría en "la fuente más importante de rentabilidad para Tesla".
"Es una locura desde el punto de vista financiero", dijo, afirmando que la tecnología de robotaxis multiplicaría por cinco la utilidad de un vehículo, ya que los propietarios pueden hacer que sus coches trabajen cuando no los necesiten.
Tesla utiliza cámaras e inteligencia artificial, evitando otras tecnologías como el radar y el lidar que incluyen rivales como Waymo. Ese enfoque ha suscitado críticas.
"Tienes que ser capaz no solo de ver a una persona, justo delante de ti, tienes que hacerlo con una fiabilidad del 99,999999999%. No es aceptable ni siquiera atropellar a alguien una vez", dijo a Reuters Austin Russell, director general del fabricante de lidares Luminar.
Philip Koopman, profesor de la Universidad Carnegie Mellon que ha estado trabajando en la seguridad de los vehículos autónomos, dijo que un gran problema es que, a escala, pueden surgir constantemente casos excepcionales.
"Sin un conductor humano que se encargue de la seguridad en situaciones inéditas que el aprendizaje de la máquina aún no ha abordado, es muy difícil garantizar la seguridad en un vehículo completamente automatizado", dijo.
REGULACIÓN
Incluso si la tecnología funciona, Tesla sería sometida a un escrutinio más riguroso por parte de los reguladores antes de desplegar flotas de robotaxis en las calles. Los reguladores de seguridad automovilística de Estados Unidos abrieron una investigación de seguridad sobre el sistema avanzado de asistencia al conductor de Tesla después de que se produjeran choques entre estos vehículos y otros de emergencia estacionados.
Los reguladores federales de la seguridad automovilística han emitido directrices para los estados, pero no normas exhaustivas que regulen los coches autopilotados.
Hay algunos estados cuyas leyes exigirán la aprobación de un vehículo totalmente autónomo, dijo Koopman.
Hace apenas un año, Musk dijo durante una conferencia de resultados que estaba "muy seguro de que el coche será capaz de conducirse a sí mismo con una fiabilidad superior a la humana este año".
El ingeniero del piloto automático de Tesla en ese momento, CJ Moore, dijo el año pasado al regulador de California que el tuit de Musk sobre la tecnología de autoconducción "no coincide con la realidad de la ingeniería".
Musk también dijo que los ingenieros están trabajando para lanzar un robot humanoide el próximo año, llamado Optimus, que podría eventualmente abordar la escasez mundial de mano de obra, y en el corto plazo podría ser capaz de transportar artículos en una fábrica.
"Para realizar tareas peligrosas y repetitivas, utilizar un robot humanoide es exactamente el enfoque equivocado", dijo Raj Rajkumar, profesor de ingeniería eléctrica e informática de la Universidad Carnegie Mellon.
Sin embargo, Musk afirma que el robot puede ser más importante que un coche. "Esto, creo, tiene el potencial de ser más importante que el negocio de los vehículos con el tiempo", dijo.
(Editado por Peter Henderson y Gerry Doyle; traducción de Flora Gómez)