El audaz objetivo de Musk de vender 20 millones de vehículos eléctricos en 2030 es el centro de la promesa de crecimiento de la empresa para los accionistas y su promesa de impulsar la adopción de la energía sostenible. De lograrse, convertiría a Tesla en el doble de cualquier fabricante de automóviles de la historia, y representaría aproximadamente el 20% del mercado mundial de vehículos.
Pero ese crecimiento exponencial -una multiplicación por 13 de los 1,5 millones de vehículos que espera vender este año- tendrá un coste sin precedentes de cientos de miles de millones de dólares, según un análisis de Reuters de las revelaciones financieras de Tesla y las previsiones de demanda mundial de vehículos eléctricos y de producción de baterías y minerales de baterías.
"Yo equipararía esto con el Proyecto Manhattan en la Segunda Guerra Mundial", dijo el experto en fabricación Michael Tracy, de The Agile Group, refiriéndose al amplio esfuerzo de Estados Unidos para construir una bomba atómica.
La visión de Musk plantea retos asombrosos al fabricante de automóviles con sede en Texas, de 19 años de edad, entre los que destaca el de conseguir suficientes baterías y materias primas críticas como el litio y el níquel para abastecer a 20 millones de vehículos.
Tesla ha sido un disruptor, pero esta próxima fase de crecimiento, si se logra, iría más allá de la disrupción para rehacer fundamentalmente la industria automovilística mundial, así como la extracción y el comercio de materiales para baterías.
En el camino, Tesla necesitaría construir siete u ocho "gigafábricas" más -una media de una cada 12 meses aproximadamente-, arrebatar cuota a todos los competidores y emerger como una empresa del tamaño de Volkswagen AG y Toyota Motor Corp juntas. También necesitaría unas 30 veces más m
ucha capacidad de baterías para abastecer a todas sus fábricas de vehículos. Ver gráfico, https://tmsnrt.rs/3CzDic4
El precio será elevado: Tesla podría gastar unos 400.000 millones de dólares o más en los próximos ocho años para construir nuevas plantas de ensamblaje de vehículos y baterías en todo el mundo, y otros 200.000 millones de dólares o más para construir o comprar las baterías, incluyendo el coste de las materias primas.
Canadá, Indonesia, India y otros gobiernos ya están presionando para conseguir la próxima inversión de Tesla en la producción de vehículos eléctricos, un anuncio que Musk ha dicho que podría llegar a finales de año.
Producir 20 millones de vehículos al año requeriría que Tesla ampliara tanto su propia capacidad de fabricación de baterías como la de sus socios de baterías y la de los productores de materias primas que les suministran.
"A largo plazo, esperamos fabricar del orden de 3.000 gigavatios hora o 3 teravatios hora al año", dijo Musk a los inversores en julio. "Creo que tenemos muchas posibilidades de lograrlo realmente antes de 2030, pero estoy muy seguro de que podríamos hacerlo para 2030".
La capacidad actual de producción de baterías de Tesla es de 100 gigavatios-hora.
Benchmark Mineral Intelligence, que realiza un seguimiento de la industria mundial de baterías para vehículos eléctricos, prevé que Tesla necesitará 2,0 millones de toneladas de litio, 1,3 millones de toneladas de níquel, 0,2 millones de toneladas de cobalto y 3,5 millones de toneladas de grafito para soportar una producción en 2030 de 3,0 teravatios-hora de baterías.
Esto supone cuatro veces más litio y níquel, dos veces más cobalto y siete veces más grafito de lo que toda la industria de los vehículos eléctricos espera consumir en 2022.
Benchmark describe los objetivos para 2030 como "muy ambiciosos".
Tesla no respondió a una solicitud detallada de comentarios.
El fabricante de automóviles, que rara vez revela sus relaciones con los proveedores, comenzó a firmar acuerdos de compra con mineros y refinadores hace más de una década, según antiguos ejecutivos de Tesla entrevistados por Reuters, y actualmente tiene
acuerdos con más de 20 proveedores de materiales en todo el mundo Ver gráfico: https: //tmsnrt.rs/3PMZpPc
La capacidad de materias primas necesaria para apoyar la producción prevista por Tesla en 2030 no existe hoy en día, dicen los expertos.
El objetivo de ventas de Musk también depende de factores que escapan al control de Tesla.
Los fabricantes de automóviles rivales están lanzando más vehículos eléctricos para competir con los sedanes Modelo 3 y los SUV Modelo Y de Tesla, de gran volumen.
En China, las empresas de nueva creación como Xpeng Inc, Nio Inc y Li Auto Inc van por detrás de Tesla en volumen de ventas, pero están creciendo rápidamente.
La empresa china BYD, que vende vehículos eléctricos e híbridos de bajo coste, está desafiando a Tesla a nivel mundial, mientras que Ford Motor Co y Rivian Automotive Inc se han adelantado a Tesla en el mercado de las camionetas eléctricas, un importante segmento emergente en Norteamérica.
Mike Tracy es escéptico respecto a la capacidad de Musk para desarrollar en los próximos ocho años un mamotreto de fabricación global con casi el doble de capacidad de producción que Toyota, actualmente el mayor fabricante de automóviles del mundo por volumen.
"Eso sería un logro extraordinario, teniendo en cuenta que Toyota ha tardado décadas en construir esa capacidad", dijo.
