Los fiscales han dicho que Milton trató de engañar a los inversores sobre la tecnología de la empresa a partir de noviembre de 2019. Dejó la empresa en septiembre de 2020 después de que un informe del vendedor en corto Hindenburg Research calificara a la empresa de "fraude".

Milton, de 40 años, se ha declarado no culpable de dos cargos de fraude de valores y dos cargos de fraude electrónico. Sus abogados han indicado que argumentarán que Milton no tenía intención de defraudar a los inversores y que otros altos ejecutivos de Nikola, incluido su consejero general, aprobaron las declaraciones de Milton.

Milton fue acusado el año pasado. Los fiscales dijeron que hizo declaraciones falsas sobre el progreso de Nikola en el desarrollo de su tecnología cuando la compañía se unió al creciente número de empresas tecnológicas y de vehículos eléctricos que salen a bolsa a través de vehículos de adquisición de propósito especial, o SPAC.

Los fiscales dijeron que las declaraciones inapropiadas de Milton incluían que Nikola había construido una camioneta "Badger" de propulsión eléctrica y de hidrógeno desde el "principio", que había desarrollado baterías en la empresa que él sabía que estaba comprando en otros lugares, y que había tenido un éxito temprano en la creación de un semirremolque "Nikola One" que él sabía que no funcionaba.

Las declaraciones de Milton en las redes sociales y en los podcasts se dirigieron a los inversores minoristas que se amontonaron en el mercado de valores durante los cierres relacionados con la pandemia COVID-19, dijeron. Milton también está acusado de estafar al vendedor de un rancho de Utah, que dijo en una demanda civil que aceptó opciones de compra de acciones de Nikola como parte del precio de compra basándose en las afirmaciones del ex director general sobre la empresa.

Nikola ha gastado hasta ahora más de 20 millones de dólares en la defensa legal de Milton, según sus archivos públicos.

La empresa salió a bolsa en junio de 2020 mediante una fusión inversa con VectoIQ Acquisition Corp. El valor de mercado de Nikola superó los 33.000 millones de dólares ese mes, pero desde entonces ha caído por debajo de los 3.000 millones.

En diciembre, Nikola acordó pagar 125 millones de dólares para resolver las reclamaciones de la Comisión de Valores de EE.UU. de que la empresa defraudó a los inversores engañándolos sobre sus productos, avances técnicos y perspectivas comerciales.