SÍDNEY, 9 abr (Reuters) - Australia ha duplicado su pedido de la vacuna contra la COVID-19 de Pfizer, dijo el viernes el primer ministro australiano Scott Morrison, mientras el país se apresura a revisar su plan de vacunación ante la preocupación por los riesgos de trombos de la vacuna de AstraZeneca.

Hasta última hora del jueves, Australia basaba su programa de vacunación en gran medida en la vacuna de AstraZeneca con un pedido de 50 millones de dosis, suficientes para las dos inyecciones requeridas para toda su población de 25 millones de habitantes, las cuales serían fabricadas en el país por la biofarmacéutica CSL Ltd.

Sin embargo, Australia se ha unido a una serie de países que han restringido el uso de la vacuna debido a los problemas de eventos trombóticos. Las autoridades sanitarias locales han cambiado su recomendación para decir que los casi 12 millones de personas menores de 50 años del país deberían recibir la vacuna de Pfizer en su lugar.

Como resultado, Australia ha duplicado un pedido anterior de Pfizer a 40 millones de vacunas, suficientes para cuatro quintas partes de la población, que se entregarían a finales de año, dijo Morrison.

El cambio de preferencia de Australia por Pfizer pone fin a sus planes de vacunar a toda la población para finales de octubre.

"No es una prohibición de la vacuna de AstraZeneca", dijo Morrison a los medios de comunicación en Canberra después de una reunión del gabinete nacional para discutir la respuesta al virus.

"Para aquellos que tienen más de 50 años, hay poderosas razones para recibir la vacuna de AstraZeneca".

(Información de Byron Kaye, con información adicional de Praveen Menon en Wellington; edición de Christopher Cushing y Michael Perry; traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdansk)