Una vez más, el intento de Credit Suisse de tranquilizar a sus clientes, inversores y empleados sobre su salud financiera, minada desde principios de año, fracasó el pasado fin de semana. Los comentarios de la dirección, antes de la presentación de la nueva estrategia prevista para finales de mes, tuvieron el efecto contrario e inflamaron las redes sociales y sembraron el rumor: que el banco iba a proceder a una ampliación de capital. 

El diferencial de sus CDS (Credit Default Swaps) alcanzó un máximo anual el viernes, y fue superado el lunes por un nuevo pico. La situación parece haberse calmado un poco mientras escribo esto.

Este nuevo escollo no era necesario. No es raro que la tumultuosa actualidad de la institución suiza ocupe las páginas de MarketScreener, y le hemos dedicado nuestra portada en varias ocasiones en los últimos meses, especialmente con : 

"No habia que invitarlo: Crédit Suisse" de Anthony Bondain. 

El anterior guiño de la rédaction dedicado a la institución, 

Una lista no exhaustiva de los contratiempos del banco.  

Dibujo de Amandine Victor para MarketScreener