El anuncio forma parte de una de las principales promesas de campaña del recién elegido Gustavo Petro, ex miembro de la insurgencia del M-19, quien asumió el cargo el 7 de agosto con la promesa de llevar la "paz total" al país andino.

"He autorizado el restablecimiento de los protocolos, permitiendo que los negociadores vuelvan a conectarse con su organización, suspendiendo las órdenes de captura de esos negociadores, suspendiendo las órdenes de extradición de esos negociadores para iniciar un diálogo con el Ejército de Liberación Nacional", dijo Petro.

"Esta resolución inicia una nueva posibilidad de un proceso de paz en Colombia", dijo Petro tras asistir a una reunión del consejo de seguridad en la provincia de Bolívar.

Representantes del ELN, que fue fundado en 1964 por sacerdotes católicos radicales, han permanecido en Cuba desde que las anteriores conversaciones, iniciadas bajo el gobierno de Juan Manuel Santos, fueron suspendidas en 2019.

El grupo dijo poco después de la elección de Petro que estaba dispuesto a considerar las negociaciones.

Petro ha dicho que una visita a Cuba este mes por parte de funcionarios colombianos e internacionales estaba destinada a tantear si el ELN, que se considera radical y no controlado por el gobierno central, está realmente dispuesto a seguir un proceso de paz.

El alto comisionado de paz de Colombia, Danilo Rueda, viajó a Cuba con el canciller Álvaro Leyva, el senador Iván Cepeda y el funcionario de la ONU Carlos Ruiz Massieu, así como con un representante del gobierno noruego.

Rueda tiene autoridad para explorar la posibilidad de conversaciones, así como para examinar si se puede establecer un cese al fuego y otras medidas, ha dicho Petro.

Las discusiones podrían comenzar donde las dejó el gobierno de Santos, dijo el presidente colombiano, quien agregó que reconocería los protocolos acordados con ayuda de los garantes Cuba, Chile, Venezuela, Noruega y Brasil.

Las conversaciones entre el ELN y el gobierno de Santos se iniciaron en Ecuador y luego se trasladaron a Cuba, pero fueron suspendidas por el sucesor de Santos, Iván Duque, porque el ELN se negó a detener las hostilidades y mató a 22 cadetes de la policía en un atentado con bomba en Bogotá.

Los anteriores intentos de negociación con el ELN, que cuenta con unos 2.400 combatientes y está acusado de financiarse con el narcotráfico, la minería ilegal y los secuestros, no han avanzado en parte por las disensiones en sus filas.

Gran parte de los dirigentes del ELN en Cuba son más viejos que muchos de sus miembros y no está claro qué influencia tienen sobre las unidades que operan en lo más profundo del campo colombiano.